EL PAíS
› GRAN BRETAÑA NEGO LA EXTRADICION DE SOLEIMANPOUR
Bielsa quiere ir a Teherán
Gran Bretaña rechazó ayer la solicitud de extradición a la Argentina del ex embajador iraní en Buenos Aires Hadi Soleimanpour, quien está imputado como partícipe necesario del atentado a la AMIA. Soleimanpour había sido detenido en Londres en agosto pasado y era reclamado por el juez federal Juan José Galeano, pero la falta de pruebas contundentes para acreditar la acusación que se le hace conspiró en contra del pedido del magistrado. La decisión de los británicos es inapelable –de hecho, el ex diplomático ya puede abandonar el Reino Unido y regresar, si así lo quiere, a Irán– y fue repudiada por la comunidad judía argentina. Mientras esto ocurría en Londres, en Buenos Aires el encargado de negocios de Irán le transmitió al canciller Bielsa que su país no aceptaba la mediación de un tercero por el atentado a la AMIA; sin embargo, ofreció realizar una reunión bilateral a agenda abierta. Bielsa aceptó y dijo que viajará a Teherán cuando sus autoridades lo dispongan.
La negativa británica de extraditar a Soleimanpour –que integraba una lista de una decena de iraníes pedidos por la Justicia argentina– no debe haber sorprendido ni a los querellantes en la causa AMIA ni tampoco a Galeano: desde el momento mismo en que el juez pidió a Gran Bretaña la extradición del ex embajador se supo que los elementos existentes para probar su condición de partícipe necesario del ataque a la mutual judía difícilmente fueran suficientes para que ese país diera curso favorable a la solicitud. Ya la semana pasada, el Ministerio de Relaciones Exteriores le había informado, además, al juez sobre una reunión mantenida en la embajada argentina en Londres donde los británicos anticiparon que el pedido de extradición sería rechazado.
El argumento que dio el gobierno británico para negar la extradición de Soleimanpour a la Argentina fue precisamente que las pruebas enviadas por Galeano “no satisfacen” los requerimientos impuestos por la Justicia británica para disponer esa medida. La resolución de los británicos es inapelable y, según explicó la abogada de la DAIA, Marta Nercellas, cierra la puerta a un eventual enjuiciamiento del ex diplomático en un tercer país, como proponía la Cancillería.
Según Galeano, como embajador de Irán en Buenos Aires en la fecha del ataque, Soleimanpour no podía desconocer las operaciones que habrían realizado sus subordinados e incluso los beneficios diplomáticos que recibió particularmente uno de ellos, el ex agregado cultural Moshen Rabbani, a quien se señala como la persona que estuvo al mando del atentado. Para acreditar la condición de partícipe necesario en el ataque, el juez incluyó en su pedido de extradición declaraciones testimoniales, incluidas algunas de sus ex empleados en la embajada de Irán, documentos secuestrados y un organigrama de la estructura terrorista iraní. También acompañó la solicitud con cables diplomáticos y un informe de la Secretaría de Inteligencia (SIDE) de enero de 2003, donde se menciona a Soleimanpour como uno de los autores del atentado.
Desde el sur
Ayer, mientras los reyes de España caminaban sobre las pasarelas de observación a los glaciares junto a Néstor Kirchner y su esposa, el canciller Rafael Bielsa informó a Página/12 que Irán rechazó la idea argentina de establecer un tribunal de un tercer país para juzgar los atentados antisemitas producidos en Buenos Aires. Así se lo transmitió el encargado de negocios iraní en Buenos Aires. Sin embargo, el funcionario diplomático le comunicó que su país estaría de acuerdo en realizar una reunión bilateral a agenda abierta. Esto significa que, de realizarse ese encuentro, se podría hablar de todo, incluso de los atentados a la AMIA y a la embajada de Israel.
Bielsa aceptó inmediatamente la propuesta y comunicó que está dispuesto a viajar a Teherán en cuanto las autoridades iraníes lo dispongan, esperando que ello ocurra lo más pronto posible. El canciller destacó, enese momento, ante el funcionario iraní, “los esfuerzos del presidente Mohamed Katami por democratizar y occidentalizar” Irán.