El canciller Héctor Timerman aclaró ayer a través de un comunicado “confusiones” que surgían de un artículo de Clarín en el que se entrevistó a Gary Samore, ex asesor en temas nucleares del presidente de Estados Unidos, Barack Obama. La Presidenta reveló en su discurso en las Naciones Unidas que ese funcionario había solicitado que la Argentina cambiara el combustible nuclear del reactor Teherán y que por ese motivo el gobierno sabía que Estados Unidos estaba negociando con el presidente iraní Mahmud Ahmadinejad.En la nota publicada por Clarín, el ex funcionario confirma estos hechos, aunque da otra fecha para el encuentro. “Samore, seguramente sin mala intención, se equivocó en la fecha de las reuniones lo que es utilizado por Clarín para armar una historia que, una vez más, sólo se condice con la mala fe del medio”, dijo el canciller. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner recomendó la lectura del mensaje del ministro de Relaciones Exteriores.

Timerman detalló que la reunión donde el enviado de Obama solicitó la ayuda de Argentina fue en su despacho el 1º de noviembre de 2010 y no en 2009, ya que él no era canciller en 2009. Agregó que el problema del combustible nuclear de Irán no pudo haber estado resuelto en 2009 “porque entonces no hubiese tenido sentido el loable intento del presidente Lula y el primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan de negociar el cambio del uranio enriquecido de Irán por uno de baja graduación”. “Dichas negociaciones –afirmó– fueron realizadas en mayo y junio del 2010 y generaron una inusitada, por lo desmedida, reacción negativa de Estados Unidos que se opuso a dicho acuerdo entre Brasil, Turquía e Irán. Una vez más el doble estándar”.

Timerman señaló que en el artículo en cuestión Samore reconoce que Obama estaba negociando un acuerdo nuclear con Ahmadinejad desde el inicio de su gobierno en 2008: “Cuando la Argentina, varios años después, concretó, siguiendo la misma lógica, un acuerdo de cooperación judicial para avanzar en la causa Amia fue acusada de negociar con un terrorista y negador del Holocausto por los mismos que callaban las acciones de Estados Unidos. Nunca más claro la diplomacia del doble estándar que denunció Cristina Fernández de Kirchner en las Naciones Unidas recientemente.”

Como reveló la Presidenta en la ONU y luego explicó el canciller en una entrevista en Página/12, la participación de la Argentina en el intercambio del combustible se frustró cuando se solicitó a Samore que dejara su pedido por escrito. Pero la Argentina no fue invitada a sumarse al pacto nuclear con Teherán, sino sólo a ser proveedor de un insumo.

La presidenta Cristina recomendó a través de las redes sociales la lectura de la aclaración sobre la “versión ‘errónea’ del pedido estadounidense” y comentó: “Me encanta el piadoso eufemismo utilizado por el canciller cuando habla de doble estándar de lo que apenas es hipocresía y cinismo permanente”.