La Corte Suprema cerró definitivamente la causa por “calumnias e injurias” que el ex presidente de la Cámara Federal de Bahía Blanca Néstor Montezanti, suspendido y camino al juicio político por su vinculación con la Triple A y su participación en delitos de lesa humanidad, inició contra un ex estudiante de la Universidad Nacional del Sur (UNS) que lo denunció precisamente por su pertenencia al grupo paramilitar.

“Se ha resuelto declarar extinguida por prescripción la acción penal, quedando cerrado definitiva e irrevocablemente el proceso a favor del querellado”, sostuvieron Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda. Amparado en los fueron que impiden detenerlo, Montezanti ya faltó en tres oportunidades a las citaciones a prestar declaración indagatoria del juez federal Alejo Ramos Padilla.

La causa se inició cuando Montezanti acusó a Alberto Rodríguez, ex estudiante y testigo del asesinato de David Cilleruelo por parte de la Triple A en 1975. Durante una reunión del consejo superior de la UNS, en 2002, Rodríguez propuso “analizar de una buena vez el plantel de docentes”, recordó que “aún hay personajes de la misión Ivanissevich que fueron cómplices de crímenes ocurridos en esta universidad” y señaló a Montezanti como “partícipe de la Triple A”. En 2007, el juez correccional José Luis Ares condenó a Rodríguez por “injurias” a pagar una multa aunque consideró “convincentes y veraces” las declaraciones de testigos que vieron a Montezanti en medio de un grupo de matones de la Triple A en la Universidad Tecnológica Nacional. Durante el juicio se supo además que cuando ejercía como abogado lucía en su estudio un certificado de la Liga Anticomunista Argentina firmado por el general Carlos Suárez Mason. La causa siguió las distintas instancias de apelación hasta llegar a la Corte, que ratificó que la pena está prescripta.