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En la primera jornada del juicio político que se le sigue, el juez federal de Mendoza, Luis Leiva, tuvo un traspié anunciado. El tribunal rechazó el pedido de recusación que elevó contra el titular del jurado de enjuiciamiento y miembro de la Corte Suprema, Eduardo Moliné O’Connor. Leiva solicitó la separación de Moliné del tribunal hasta tanto dure el juicio político que, a su vez, la Cámara de Diputados inició contra los nueve jueces de la Corte. Rechazado el planteo, se leyeron los cargos contra Leiva, que consisten en supuestas irregularidades en la instrucción de las causas que concluyeron con los cierres de los bancos Mendoza y República. La recolección de pruebas se extenderá por 30 días.
La defensa de Leiva, a cargo del abogado Daniel Sabsay, justificó el pedido de apartamiento de Moliné en que en la investigación de la llamada causa Moneta la Corte Suprema declaró la incompetencia del juez mendocino. En esa ocasión, el voto mayoritario al que adhirió Moliné le quitó la causa a Leiva para dejarla en manos del juez federal Gustavo Literas, algo que –en la interpretación de Sabsay– constituyó “prevaricato”, por lo que consideran que no correspondería que quedara a cargo del tribunal que ahora debe decidir su permanencia como juez.
La parte acusadora –representada por los miembros del Consejo de la Magistratura Miguel Angel Picheto, Juan Gersenobitz y Jorge Casanovas– solicitó al jury que rechace el planteo porque las causas invocadas por la defensa “forman parte de la cuestión de fondo” y, por lo tanto, “merecen un debate más amplio”. El pedido obligó a un cuarto intermedio de dos horas, tras lo cual el planteo de Leiva fue rechazado.
Para los próximos días se prevé la declaración de unos treinta testigos y, luego, cuando se complete la recolección de pruebas, las partes dispondrán de 30 días para formular sus alegatos. Terminado el proceso, el Jurado de Enjuiciamiento deberá dar a conocer su sentencia en un plazo máximo de 20 días. Al respecto de las pruebas, se supo ayer que uno de los principales testigos ofrecidos por Leiva, el ex fiscal de Estado mendocino, Aldo Giordano, no viajará para declarar y que ya envió su declaración por escrito. “En el escrito da cuenta de lo que sabe sobre la transferencia de los ex bancos provinciales al empresario Raúl Moneta”, contaron allegados a Giordano.