–¿Qué opina del adicional por desarraigo que cobran los senadores, incluyendo a su marido Luis Barrionuevo, pese a que viven en San Martín?
–El desarraigo es parte del salario que cobran los legisladores. Mi marido es legislador por Catamarca y está mucho tiempo allá, más de lo que la gente se imagina. Con lo cual ha desatendido francamente el hogar.
–¿Le está haciendo un reproche?
–Sí, público. El tiene un fuerte compromiso con su provincia. Por otra parte, mi marido es bastante descuidado con lo que cobra, porque habitualmente reparte bastante de lo que cobra.
–¿Reparte en qué sentido?
–Es una persona que es muy solicitada para la resolución de problemas de la gente con remedios, viajes o pequeñas cosas que atiende con mucha dedicación. Por otra parte, tengo entendido que él tiene otorgado un poder para que le cobren el salario. Cuando surgió este tema yo le pregunté si lo cobraba y él no sabía. Es bastante descuidado en algunas cuestiones.
–Barrionuevo también apareció involucrado con este proyecto de obra social de bancarios en el que se investiga una versión sobre coimas.
–Es una lástima que los medios hayan titulado ese proyecto “de coimas”. Lo que están haciendo con eso es privar a los trabajadores de una buena fuente de recursos y beneficiando a los banqueros. La actuación de mi marido en ese episodio está referida pura y exclusivamente a haber sido el legislador que lo presentó, a la semana de haberlo presentado le dio dictamen en la comisión que preside y lo pasó a las otras comisiones para el tratamiento en el recinto. Me da la impresión de que hay una maniobra muy grande para desprestigiar un muy buen proyecto que beneficia a los trabajadores y que debería salir de Diputados convertido en ley.