El fallo dictado por la Corte Suprema para descriminalizar la tenencia de drogas para el consumo recibió elogios y críticas desde el arco político, judicial y religioso. Las negativas más duras aparecieron desde la oposición, con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, entre ellos. Mientras que el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, estuvo entre los que le dieron el visto bueno a la decisión judicial. La sorpresa llegó desde el Arzobispado de Mendoza, que elogió el fallo: otras autoridades de la Iglesia se habían pronunciado en contra, aunque el equipo de curas villeros se manifestó a favor.

“Es un debate que nos deberíamos dar una vez que tengamos un Estado que funcione”, aseguró Macri. El jefe de Gobierno consideró que no es “oportuno” el veredicto y reclamó “políticas contra las adicciones”.

Al otro lado de la General Paz, Scioli apuntó que el fallo de la Corte “fortalece la capacidad operativa para combatir el tráfico ilícito de estupefacientes” y consideró que “hasta ahora, estaba obstaculizada por detener a los consumidores”. También subrayó que “alienta a adoptar medidas preventivas de salud”.

Desde la oposición, el diputado de Unión PRO Francisco de Narváez repitió sus críticas contra la decisión de la Corte: “Debemos concentrarnos en detener el ingreso de drogas, que ha aumentado exponencialmente transformándonos en un país de producción y consumo, y no facilitarles el trabajo a los narcotraficantes”, indicó el legislador citado a declarar en una causa por tráfico de efedrina.

En el ámbito judicial, la camarista federal rosarina Laura Inés Cosidoy –conocida por denunciar conexiones entre narcotraficantes y autoridades policiales y políticas– advirtió que la decisión del máximo tribunal es “una cortina de humo” porque a pesar de la mención contra el narcotráfico “va a seguir lloviendo droga”.

El gobernador de La Rioja, Luis Beder Herrera, fue otro de los que insistió en su rechazo al fallo porque se trata de “un pésimo mensaje” para sociedades como la riojana, “que no están preparadas”, aunque reconoció que “hay que aceptar lo que la Corte está sentando como jurisprudencia”. En cuanto al pedido de la Corte de tratar el tema en el Congreso, Beder Herrera indicó que tendrá que “sancionar leyes para establecer un régimen de protección” para los adictos. En ese sentido, el juez federal riojano, Daniel Herrera Piedranueva, también se manifestó en contra ya que en las provincias “todavía necesitan un gran soporte en salud pública para contener a los adictos”.

Un respaldo inesperado al fallo llegó desde el Arzobispado de Mendoza a cargo de su vocero, Marcelo De Benedectis, que lo consideró “muy preciso” y resaltó que pone el acento en “la prevención y en atacar el narcotráfico”. De Benedectis apuntó que la sentencia “no legaliza la droga en el uso o la circulación”. Por último, pidió que “no tengamos miedo”, porque “nadie quiere que el consumo de drogas aumente, sería un mal para la sociedad. Tenemos que poner políticas positivas, reales y eficaces en la prevención, educación y recuperación de los que han caído en la adicción”.