- Hernán González Moreno. El muerto. Ex director del diario El Libertador y jefe de Agencia Corrientes de noticias, una de las manos derechas de Arturo Colombi.

- José Luis “Billy” Zampa. Jefe de Información Pública del gobierno. Difundió la teoría del suicidio de Hernán González Moreno y de los aprietes de parte de Ricardo Colombi. Declaró como testigo en la causa. Está imputado en una investigación paralela por los fondos de publicidad de la Agencia Corrientes. Renunció a su cargo el jueves pasado.

- César Sotelo. Es el jefe del equipo de fiscales. Arturo Colombi lo acusa de ser “ricardista”. No es el único, parte de la clase política suele rumorear lo mismo. Los periodistas locales más avezados dicen que hay que separar los tantos. Que Sotelo puede ser lo que sea, pero que las acusaciones contra el arturismo existen. Sotelo dice que el gobernador lo critica porque entiende que está cercado por una numerosa cantidad de causas judiciales.

- Arturo Colombi. El gobernador. Primo del ex gobernador y gobernador electo Ricardo Colombi. Arturo quedó como heredero del primer gobierno de Ricardo. Fue un ministro de “casco amarillo”, de bajo perfil y quien llegó al sillón de la gobernación porque aún no había reelección en la provincia. El equipo de fiscales a cargo de la investigación por la muerte de Hernán González Moreno le mandó un cuestionario para que responda las preguntas como testigo de la muerte. Colombi aseguró que iba a reenviarlas mañana lunes. Arturo Colombi conocía al padre de Hernán González Moreno desde siempre, eran vecinos de Mercedes.

- Ricardo Colombi. Próximo gobernador de Corrientes. Acaba de ganar el ballottage del 4 de octubre y asumirá nuevamente el sillón de la gobernación que le había dejado a su primo. Hernán González Moreno lo denunció antes de su muerte por la compra de una casa millonaria a nombre de un insolvente. Los ricardistas dicen que nunca les llegó ninguna notificación oficial. Curioso, puede ser que sea cierto. En el auto del muerto apareció un sobre. Algunos dicen que era la denuncia que Hernán iba a formalizar contra Ricardo. Lo raro es que desde el gobierno de Arturo nadie haya dicho nada más sobre esa denuncia.