En la trama de espionaje que investiga el juez Norberto Oyarbide, dos ex jueces de Misiones –Horacio Gallardo y José Luis Rey– tuvieron un papel crucial: ordenaban escuchas para que hiciera la SIDE truchando expedientes judiciales y autorizaban a Ciro James a retirar las cintas. Una comisión especial de seguimiento de las escuchas ilegales que creó la Cámara de Representantes misionera para investigar el alcance que tuvo esta maniobra difundió un informe preliminar, basado en miles de expedientes. Detectó hasta ahora unos 200 procedimientos con escuchas telefónicas, el 90 por ciento de los cuales se ordenó desde los ex juzgados locales de Rey y Gallardo, con la peculiaridad de que el 38 por ciento “han sido en la provincia de Buenos Aires y el tres por ciento en otras provincias”, según informó el titular de la comisión, el diputado Hugo Passalacqua. El 59 por ciento se hizo en Misiones.