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-Vuelta. Luego de participar de la Cumbre de la Unasur, la presidenta Cristina Kirchner partió a las 15.45 desde Georgetown con destino a Río Gallegos, donde tenía previsto pasar el fin de semana. Será la primera vez que la Presidenta vuelva a Santa Cruz luego de la ceremonia en el cementerio de Río Gallegos en la que se inhumaron los restos de Néstor Kirchner. Se suponía que, en el día en que se cumple un mes de la muerte del ex presidente, la Presidenta volvería a pasar por el cementerio.

-Economía. Los presidentes de la Unasur crearon el Consejo Suramericano de Economía y Finanzas. Su primer presidente será el ministro de Economía argentino, Amado Boudou. El consejo estará a cargo del diseño de una nueva arquitectura financiera para la región. En el Gobierno celebraron la iniciativa, que es resultado del trabajo del Grupo de Integración Financiera, que preside el viceministro Roberto Feletti desde 2007.

-Vínculo. Como actividad paralela a la cumbre de ayer, los gobiernos de Colombia y de Ecuador restablecieron plenamente las relaciones diplomáticas, rotas desde marzo de 2008, cuando el ejército colombiano bombardeó un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano para matar a Raúl Reyes, el segundo de la organización guerrillera, y desencadenó una crisis en el vínculo bilateral. Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Ecuador, Rafael Correa, anunciaron su decisión, tras una reunión en Georgetown.

-Arrestos. Lula llegó a la cumbre en medio de los graves enfrentamientos que el ejército brasileño y narcotraficantes están librando en las favelas de Río de Janeiro. En ese sentido, el presidente brasileño se preocupó en dejar en claro en Georgetown que no era cierto que las tropas brasileñas estuvieran haciendo arrestos, como se había informado. “Es la policía militarizada de Río la que tiene que arrestar. El ejército se limitará a apoyar”, aclaró Lula, dado que el ejército no tiene autorización para arrestar ciudadanos.

-Ilegal. El canciller Héctor Timerman destacó que en la declaración que se emitió ayer por primera vez se utilizó la expresión “bandera ilegal” para los barcos de Malvinas que busquen atracar en el continente. La resolución, argumentó, representa un “claro avance contra el colonialismo” británico. Los gobiernos “se comprometen, en el marco de los acuerdos internacionales vigentes, a informar al gobierno argentino sobre aquellos buques con cargas destinadas a las actividades hidrocarburíferas en la plataforma continental argentina y, de este modo, prevenir o evitar que estas actividades se consoliden”, celebró.