La primera referencia a “El Padrino” había sido en 2005, cuando Cristina Fernández se enfrentó al duhaldismo como candidata a senadora en la provincia de Buenos Aires. Alejados definitivamente desde entonces, la Presidenta volvió ayer a relacionar al ex presidente interino Eduardo Duhalde con el personaje de ese clásico del cine sobre la mafia y le achacó responsabilidad en los incidentes de los últimos días. “Esto, amigos y compañeros, no es que se desmadró, se apadrinó, que es diferente.” Así, durante un acto en José C. Paz, CFK señaló “operaciones” políticas para desgastar a su gobierno y rechazó el llamamiento al “orden” realizado por Duhalde. El candidato del PJ opositor había dicho poco antes que el Gobierno “le echa la culpa en forma recurrente” y que está “profundamente confundido”.

La controversia entre el oficialismo y Duhalde respecto de las muertes y las tomas de tierras en Villa Soldati arrancó la semana pasada, cuando el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, lo señaló como uno de los responsables de la violencia. Desde Estados Unidos, el ex presidente había reclamado que las fuerzas de seguridad reinstalaran el “orden”.

De vuelta en Argentina, Duhalde advirtió ayer que el país está viviendo “un clima preanárquico” y retomó el discurso de la semana anterior: “Yo hablo de la necesidad de pacificar y ordenar nuestro país. Aníbal Fernández tiene mala memoria. El día que asumí la presidencia dije que la primera tarea es ordenar y pacificar la Argentina. Y eso no se hace con fusiles, se hace con diálogo”, sostuvo el bonaerense.

Al mediodía, Cristina Fernández aprovechó su discurso en José C. Paz para responder a las palabras de Duhalde. Luego de mencionar “las operaciones de los que ya sabemos quiénes son” en contra del Gobierno, afirmó que la situación “no es que se desmadró, se apadrinó”. Inmediatamente, la palabra “apadrinó” remitió a aquella famosa frase con la que Cristina Fernández lanzó su candidatura a senadora por la provincia, en julio de 2005: “Cuando (al Gobierno) se le interponen escollos institucionales para que no gestione, eso no es libreto peronista, es un guión y dirección de Francis Ford Coppola, y el resultado no es un manual de conducción política, es la película de El Padrino”.

Ayer, la Presidenta rechazó además los reiterados llamados al “orden” del precandidato del PJ disidente. Acompañada por el gobernador Daniel Scioli, el intendente Mario Ishii y el ministro de Interior, Florencio Randazzo, consideró que el orden que merece un país “es el orden del progreso y de la movilidad social”. También cargó contra los diarios que hablan de “lo mal que anda el país”.

En otro pasaje que apuntaba al ex presidente, la jefa de Estado mencionó a los que, “no pudiendo conquistar el lugar de presidente de la República por el voto popular, hayan siempre intentado socavar a los que sí lo hemos logrado, y entonces realizar provocaciones y operaciones que estamos viendo todos los días, cotidianamente”. También CFK señaló que a diferencia de los años posteriores a la crisis de 2001, ahora son los españoles los que vienen a la Argentina.

La Presidenta cargó además las tintas sobre Mauricio Macri, a quien acusó de quejarse y echarles la culpa a los otros. “Díganme si alguna vez lo escucharon (a Néstor Kirchner) quejarse de que no podía ayudarlos o darles una vivienda porque otros se lo impedían”, recordó Cristina Fernández.

En su faceta cibernética, Aníbal Fernández también le respondió a Duhalde y dijo que “el confundido, el recontra confundido” es él. “La experiencia me enseñó a no confundir a la sociedad, a no mentirle, a no prometer lo que no haré, ni a someterlos a situaciones de- sagradables. Aprendí a trabajar incansablemente sin hacerles el caldo gordo a los poderosos. Mis ideas ya no son las mismas que las suyas”, concluyó.