“Tenemos que abrir nuestras cabezas en función de superar las diferencias de género, de sexo, de ideología. Queremos que las Fuerzas Armadas se caractericen por ser no sólo las más capacitadas desde el punto estrictamente militar, sino las más respetuosas de los derechos humanos y por tener el perfil de apertura mental más grande”, aseguró ayer el nuevo ministro de Defensa, Arturo Puricelli. En su primer día en funciones, el reemplazante de Nilda Garré aseguró además que continuará la línea de su antecesora, porque el área tiene una política de Estado marcada “por la presidenta de la Nación”.

El titular de Defensa afirmó además estar “entusiasmadísimo” con su nueva tarea, ya que “hay muchas cosas por hacer”. “Hay una continuidad de lo que viene trabajándose con un marco legal muy sólido, y nos permitirá, por primera vez en los últimos 50 años, tener una política de defensa moderna y acorde a las necesidades de esta Argentina.”

Durante la jornada, Puricelli encabezó el acto en el que asumió el nuevo comandante operacional de las Fuerzas Armadas, el general de brigada Gustavo Lux. Egresado del Colegio Militar en 1973, del arma de Caballería, Lux se desempeñaba hasta ayer como comandante de Educación y Doctrina del Ejército. En su carrera figura el haber sido jefe de Operaciones del Estado Mayor del Ejército y haber participado como observador militar en Angola, tarea por la cual recibió una condecoración de la ONU. Además, Lux fue agregado militar de la Embajada Argentina en Paraguay.