El procurador general de la Nación, Esteban Righi, le concedió licencia a la fiscal Cristina Caamaño para asumir como secretaria de Seguridad de la Nación, pero le recordó que no podrá realizar “política partidaria ni proselitismo de ninguna especie”. Righi le dio a Caamaño licencia extraordinaria como titular de la Fiscalía de Instrucción 4 sin goce de haberes y por el plazo que dure su función en el flamante Ministerio de Seguridad a cargo de Nilda Garré. El procurador le recordó a Caamaño que mientras cumpla su cargo en el Gobierno “no podrá realizar actividades propias de la denominada ‘política partidaria’ ni proselitismo de ninguna especie”. También señaló, en la resolución 122/10, que podrá disponer el fin de la licencia y que al retomar sus funciones de fiscal deberá excusarse de intervenir en causas judiciales que estén relacionadas con hechos o personas vinculadas con su cargo en el ministerio. Caamaño será reemplazada por el fiscal de instrucción 8, Fernando Fiszer, que a partir de ahora se hará cargo de la causa por el homicidio del militante del Partido Obrero (PO) Mariano Ferreyra, que llevaba la flamante funcionaria.