Para la capacitación profesional y técnica de los prestadores regionales de seguridad el documento del Pentágono exalta al Instituto de Cooperación para la Seguridad en el Hemisferio Occidental (Whinsec), “en el contexto de los principios democráticos” de la OEA. No es eso lo que piensan los 69 diputados estadounidenses (en su mayoría del gobernante Partido Demócrata) que en agosto del año pasado solicitaron al presidente Barack Obama que cerrara ese Instituto “cuya trayectoria y legado, como la de su predecesora, la Escuela de las Américas, son muy problemáticos para amplios sectores de la sociedad civil latinoamericana”. Agregan que en 1999, cuando el Congreso votó por acuerdo bipartidario la clausura de la Escuela de las Américas, el Pentágono actuó con cinismo: “Cerró la Escuela una mañana y a la mañana siguiente inauguró la Whinsec, en el mismo lugar y con mucha similitud”. Peor aún, en 2006, retiró de la luz pública la lista de cursantes. “Este rechazo a la rendición de cuentas y la transparencia refleja los valores y actitudes del Pentágono y el Whinsec acerca del debate público sobre los méritos de ese instituto. Es ofensivo que una institución que se dice creada para fortalecer los valores democráticos y el respeto de los militares latinoamericanos por la sociedad civil exhiba tal desprecio por las organizaciones no gubernamentales y de derechos humanos de Estados Unidos y del hemisferio.” Así el Pentágono priva a las ONG de monitorear cómo aplican los graduados lo aprendido en el Whinsec cuando regresan a sus países. “En nuestra opinión es más probable que los militares latinoamericanos tomen más nota de los actos que de la retórica del Whinsec”, dicen los diputados estadounidenses, quienes entienden que para lograr un cambio institucional duradero en las Fuerzas Armadas sería mejor que los propios países latinoamericanos se encargaran de “establecer programas de derechos humanos y estado de derecho, tal vez tomando como modelo el ejemplo argentino. Hace varios años, cuando decidió retirar a casi todos sus cursantes del Whinsec, el Ministerio de Defensa de la Argentina creó instituciones educativas para sus Fuerzas Armadas y de Seguridad que incluyen cursos de varios meses, y no sólo de ocho horas, sobre derechos humanos y derecho constitucional. Tales cursos son dictados por especialistas en derecho y derechos humanos provenientes de las propias instituciones académicas y de derechos humanos. Este es el tipo de cambio institucional duradero que Estados Unidos debería promover en el hemisferio y no paseos de dos a cuatro semanas para asistir al Whinsec”, concluyen los diputados, entre ellos el demócrata de Massachusetts James P. McGovern y el republicano de Texas Ron Paul, considerados el más progresista y el más conservador de los actuales representantes. Paul es el inspirador intelectual del Tea Party.