El represor Reynaldo Bignone y otros diez acusados escucharán mañana al mediodía la sentencia que el Tribunal Oral Federal Nº 1 de San Martín les dictará en el marco del juicio al que fueron sometidos por los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura en el regimiento de Campo de Mayo. Desde la mañana, movimientos de derechos humanos, acompañados por agrupaciones políticas y sociales, esperarán el veredicto frente a los tribunales, con una radio abierta y pantallas gigantes que transmitirán en vivo las palabras finales de los jueces.

El juicio oral que comenzó hace casi siete meses intenta atribuir responsabilidades por los delitos de lesa humanidad cometidos contra 23 víctimas, entre ellas siete mujeres embarazadas. La mayoría permanece desaparecida. La megacausa –así se lo conoce justamente por la cantidad de expedientes– incluye la investigación sobre la apropiación de Laura Catalina de Sanctis Ovando, nacida mientras su mamá, Myriam Ovando, se encontraba detenida ilegalmente.

El dictamen de los jueces Héctor Sagretti, Daniel Cisneros y Daniel Petrone se conocerá después del mediodía, luego de que los imputados hayan tenido la posibilidad de decir sus últimas palabras. Junto a Bignone fueron enjuiciados los militares retirados Santiago Riveros, Eugenio Guarañabens Perelló, Julio San Romón, Luis Sadi Pepa, Hugo Castagno Monge, Carlos Somoza, Carlos Macedra y Eduardo Corrado. Carlos del Señor Garzón y María Francisca Morillo fueron acusados por la apropiación de Catalina, que recuperó su verdadera identidad en 2008, tras la búsqueda de las Abuelas de Plaza de Mayo.

El juicio busca dilucidar el destino que tuvieron, entre otras víctimas, siete mujeres que al momento de ser detenidas estaban embarazadas: Isabel Acuña, Miryam Ovando, Susana Stritzler, Beatriz Recchia, Marta Graciela Alvarez, Ana María Lanzilotto y María Eva Duarte.