Santiago del Estero vuelve a salir a la calle. Varias organizaciones sociales ayer lanzaron una convocatoria para una movilización de repudio contra la grabación y la difusión del tape sobre el obispo Juan Carlos Maccarone. La concentración se llevará a cabo mañana a las 20 frente a la Catedral después de un día que promete una agenda callejera agitada, con escraches públicos frente a las empresas del grupo del empresario Néstor Ick. Aunque se espera una presencia masiva de santiagueños en las calles, los organizadores tienen dudas sobre los resultados: “Muchos de los católicos están tan espantados por el tema sexual que se borran de la cabeza el espionaje, y todo lo demás”, dijo uno de los integrantes de la Multisectorial consultados por Página/12.
A medida que van pasando los días, la renuncia del obispo parece volver a poner en escena a los actores políticos que salieron a la luz en la última época del juarismo para denunciar las características más sórdidas del régimen. Ayer hubo conferencias de prensa, presentación de denuncias ante los medios, reclamos de la fiscalía federal y hasta un comunicado distribuido en los pasillos de los tribunales porteños firmado por la Federación de Entidades de Profesionales Universitarios de Santiago (Fepuse). “Más allá de la situación personal del obispo –decía el comunicado–, el hecho deja en claro que, detrás de ello, hay un mensaje mafioso al movimiento social que produjo los cambios en el antiguo régimen, que por lo visto no ha sido desalojado del poder real.” Los hechos que derivaron en la renuncia del obispo, explicaron, “demuestran que estamos todos amenazados por el mismo poder, antes explícito y hoy oculto y dispuesto a condicionar la institucionalidad democrática”.
Fuera de Buenos Aires, la multisectorial que nuclea a varias organizaciones intermedias convocó a una movilización para el viernes y le pidió al gobierno provincial que la Justicia investigara la hipótesis de la extorsión contra el obispo. “Reclamamos de oficio una investigación de este hecho de extorsión y que de no esclarecerse pone en riesgo las aspiraciones de cambio de la sociedad”, dijo en una rueda de prensa el dirigente socialista Aldo Bravo.
Otro de los sectores que se movilizaron fueron los familiares de las víctimas del doble crimen de La Dársena, piqueteros y organizaciones de derechos humanos desde donde partió la consigna de los escraches, programados para el viernes a la mañana. “Detrás de la renuncia de Maccarone está la mafia del grupo económico de (Néstor y Gustavo) Ick, que sigue digitando en la provincia, y la única manera de erradicarlos es con el pueblo en la calle, como ocurrió con los Juárez”, dijo el ahora convencional constituyente Mario Castillo, del MST.