El canciller Rafael Bielsa descartó ayer desde España un “tarifazo” telefónico después de las elecciones y confirmó que Aguas de Barcelona (Agbar) “seguramente” tendrá un “papel preponderante” en las operaciones con Aguas Argentinas, pese a que el 51 por ciento de esa empresa sea de Suez, que se retira. “El hecho de que se retire Suez con su cuota parte de Aguas de Barcelona no implica que Aguas de Barcelona no pueda continuar en la explotación, si esto es satisfactorio y le supone una ecuación económico-financiera interesante”, destacó Bielsa y subrayó: “No hay un contrato de esponsales en las empresas”. El canciller hizo referencia a la situación de la empresa de aguas antes de conocerse el principio de acuerdo al respecto que anunciaron el presidente Néstor Kirchner y su par español, José Luis Rodríguez Zapatero (ver aparte). Desde Salamanca, donde acompaña al Presidente en la XV Cumbre Iberoamericana, Bielsa –en declaraciones a dos radios porteñas– descartó un “tarifazo” telefónico, pero confirmó que “se está negociando un cronograma de aumento progresivo y selectivo”. Tales negociaciones están en manos del ministro de Planificación, Julio De Vido, quien descartó tajantemente que en este viaje se aborde el asunto de los aumentos.