Mientras se espera la audiencia donde los tres gobiernos, nacional, provincial y porteño, deberán presentar los detalles para sanear el Riachuelo, ya comenzó “la erradicación y traslado” de 15 de las empresas que más contaminan la cuenca. Así lo aseguró la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, quien admitió que en “algunos sectores” las mejoras en el espejo de agua se podrían notar “dentro de un año”. Sin embargo, en las zonas de mayor contaminación la limpieza tardará unos “diez años, a grandes rasgos”.

Picolotti, quien además encabezará el Comité de Cuenca con autoridad sobre el curso de agua una vez que el Congreso sancione el proyecto de saneamiento, agregó que “no hay un censo preciso” sobre la cantidad de empresas instaladas a lo largo de la cuenca. “Se empezó por las que están identificadas, evaluando cuáles son las más necesarias de trasladar, el costo que significaría en términos laborales y sociales, cuáles son las que puedan trasladarse más rápido y trasladarlas de manera prolija porque no pueden llevar la contaminación a otro lugar del país”.

Ahora están trabajando con “quince” empresas que “están produciendo mayor riesgo a la población o mayor contaminación y que no pueden convivir con el saneamiento, por lo que les estamos solicitando la erradicación y pidiendo el traslado”. Para el gobernador bonaerense, Felipe Solá, “en cinco años toda la cuenca dejará de estar en emergencia”. “El proyecto va a requerir de una gran comprensión de la gente”, sostuvo.

En tanto, el proyecto de ley que crea la autoridad de la Cuenca Matanza-Riachuelo, presentado el lunes por el presidente Néstor Kirchner en la Casa Rosada, ingresó ayer a la Cámara de Senadores.