“Nunca deberían suceder cosas de estas características.” Por segundo día consecutivo, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, salió a decir lo que toda la dirigencia política argentina, o casi toda, parecería compartir. “Los temas gremiales son reclamos que van a seguir existiendo y seguramente se van a resolver con una herramienta fenomenal: las negociaciones colectivas, donde los empleadores y los trabajadores resuelven sus temas”, subrayó. Se refería a la puja salarial en la que están inmersos los docentes de la mayoría de las provincias, una tendencia que probablemente seguirán otros gremios. Fernández dijo que el rol del Gobierno será “administrar de la mejor manera” las “discusiones salariales y situaciones sociales” que se produzcan a partir de ahora.