Durante su primer acto de campaña electoral, CFK fue presentada como futura presidente. La entonces candidata corrigió, Pre-si-den-ta, vayan acostumbrándose, Pre-si-den-ta. Ahora que ya asumió, está columna comunica que ni siquiera intentará acostumbrarse a la feminización requerida. El participio es una forma no personal del verbo, “susceptible de recibir marcas de género y número”. Desde un punto de vista gramatical la disposición presidencial no es incorrecta pero tampoco obligatoria y la marca de género puede residir en el artículo y los adjetivos que la acompañen. Tampoco diremos la bella durmienta.