ESPECTáCULOS › CRUISE Y SPIELBERG A FAVOR, JESSICA LANGE EN CONTRA
Una guerra que divide aguas
Tom Cruise y Steven Spielberg manifestaron su apoyo a la política del presidente estadounidense George W. Bush contra Irak, en el marco de la presentación que ambos están haciendo de su película Minority report –Sentencia previa, en Roma. En rueda de prensa, Spielberg opinó que si Bush “tiene informaciones ciertas que prueban que Saddam Hussein está por fabricar armas de destrucción masiva, no puedo no apoyar la política de su administración”. Por su parte, Cruise, quien asistió ayer junto con Spielberg a la primera proyección de la película en un cine de Roma, comentó: “No conozco las informaciones que posee el presidente Bush, pero creo que Saddam cometió numerosos crímenes contra la humanidad y contra su pueblo”. Al concluir la proyección, Cruise, Spielberg y la actriz Gwyneth Paltrow asistieron a una fiesta en su honor ofrecida por el creador de moda Valentino.
Por su parte, la actriz estadounidense Jessica Lange aseguró ayer, en el marco del Festival de Cine de San Sebastián (ver página 24), que se avergüenza del gobierno que dirige su país. “Casi me siento avergonzada de ser estadounidense, es humillante”, dijo la protagonista de Tootsie y El cartero llama dos veces, al ser consultada por su impresión sobre los planes estadounidenses de atacar Irak. “Estamos en un momento muy peligroso”, dijo Lange, quien apuntó que ni el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ni su equipo de gobierno le merecen ningún respeto, ya que, según afirmó, llegaron a la Casa Blanca en unas elecciones “robadas”. “El ataque a Irak sería una verdadera locura”, insistió la actriz, que también se lamentó de que no exista una mayor oposición a nivel nacional e internacional. “Bush no puede ir por el mundo haciendo lo que hace. Es inconstitucional, inmoral e ilegal”, remarcó, a lo que la prensa que se encontraba en la sala respondió con un fuerte aplauso. En su opinión sólo habría que recordar lo que pasó con la guerra de Vietnam. “No puedo entender –dijo– que no exista ese mismo tipo de conciencia entre los jóvenes, porque ellos van a pagar las consecuencias.” Por último, la intérprete estadounidense concluyó que “espero que alguien haga algo para revertir esta situación”.