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Por Fernando Abdala

Susana Giménez, para muchos la mayor estrella de la televisión argentina, seguirá brillando, pero por su ausencia: no empezará con su ciclo 2002 por lo menos hasta setiembre. Nicolás Repetto tampoco retomará su ya clásico “Sábado Bus”, luego de una temporada floja en Canal 13. Jorge Guinzburg tuvo que abandonar, ¿sólo hasta que pase la tormenta?, su proyecto como productor independiente y aceptó ser contratado como conductor por Telefé, abandonando América. Marcelo Tinelli, que en lo personal pudo escaparse del corralito con una maniobra financiera, no podrá tener tantos programas al aire como anunció el año pasado. Ni su reality show por la Patagonia ni “Cuatro amigas”, por dar algunos ejemplos, serán parte de la grilla este año. Su empresa, por otra parte, se desprenderá de una cantidad importante de personal. La lista de bajas y deserciones en la televisión argentina de aire es larga, cuando recién empieza febrero.
“Chiquititas” no saldrá al aire esta temporada, según informó ayer Soledad Silveyra, que había sido contratada para conducirlo. La productora de Diego Gvirtz, PPT, responsable de “Televisión registrada” e “Indomables”, archivó un programa de entretenimientos para el que incluso ya tenía un sponsor. Cuatro Cabezas no logró cerrar con el 13 la incorporación de “Punto/doc”. “Versus” se quedó sin aire en Telefé y no tiene posibilidades de retornar hasta mayo. De hacerlo tal vez desembarcaría en Azul. El 13 acaba de levantar el programa de verano de Juan Alberto Mateyko, por falta de rating y de dinero para mantenerlo. “Mariana de casa” termina en marzo. “La misión” no volverá al aire. El programa “Pasapalabras”, conducido por Claribel Medina, grabó por última vez durante la semana que hoy concluye. La reducción de los presupuestos será durante 2002 el denominador común de una temporada en que todo se abaratará. La ficción será el género más afectado ya que es uno de los que precisa de mayores recursos, tanto humanos como técnicos.
El gerente de uno de los tres canales privados con mayor rating plantea la situación así: “Un hombre tiene gangrena en su pierna izquierda. La gangrena es un tipo de infección complicada que en la mayoría de los casos termina con la amputación del miembro en cuestión. Un grupo de médicos se reúne en la sala contigua a la del paciente para tratar de encontrar la mejor solución al problema. En este caso, lamentablemente, la solución no va a tener que ver con recuperar la pierna infectada. Están discutiendo por dónde cortar. Perder la pierna para salvar al hombre. Ante determinadas patologías, la solución no siempre tiene que ver con volver al estado inicial antes de la enfermedad. Muchas veces hay que amputar. Después de la operación, el hombre no será el mismo. No va a tener sus dos piernas como antes y tendrá que aprender a moverse de otra manera. La televisión argentina tiene gangrena. Una enfermedad que los canales sufren hace varios años, pero que la crisis de turno complicó y bastante. Los directivos, gerentes de programación, productores independientes son los médicos encargados de la solución. Habrá que ver por dónde se corta y cómo serán las nuevas reglas de juego para seguir moviéndose”.
Carlos Ulanovsky, periodista y analista de medios, que adhiere a la metáfora, agrega: “Además, las ejecuciones y amputaciones van a ser mucho más veloces que antes. Los productores están pensando en cortar por todos lados. No me alegra, pero no puede ser de otra manera. Vivimos un momento de empequeñecimiento”. Para todos los que trajinan en el medio los canales, productoras independientes y televidentes van a sentir más que nunca una crisis que en los últimos años se viene agudizando. Para Miguel Rodríguez Arias, productor independiente, responsable de “La centuria”, que va por el 13, 2002 será un año extramadamente complicado. “Para todala gente que trabaja en televisión, incluyendo las productoras independientes, que van a ver muy reducidos los márgenes de ganancia, éste será el año en que vivimos en peligro, de verdad. Los que perdían o salían hechos van a quedar afuera del mercado.” El productor general y socio de Cuatro Cabezas Diego Guebel sostiene que “hay que terminar de medir hasta dónde llega la crisis, porque es difícil tomar enero como parámetro. Este momento es la plancha. Es cierto que, si esto sigue así, habrá que hacer un replanteo muy grande. El año pasado estábamos a la mitad de la pauta publicitaria que en el ‘99. Creo que este año vamos a estar en una torta publicitaria igual o más baja que la del año pasado”.
Otro fenómeno subsidiario de la crisis fue el auge de los programas periodísticos. La demanda de información aumentó y mucho, en un momento en que las noticias vuelan. Las mediciones de rating de los programas y canales periodísticos de estos últimos dos meses confirman esta realidad en forma contundente. Patricia Veber, gerente de programación de América 2, es consciente de esta situación y sabe que regirá parte importante de la grilla del canal durante este año. “Estamos reforzando la programación periodística siguiendo el ritmo de los acontecimientos”, dice. “La gente pide y necesita estar informada y nosotros respondemos a lo que pide la gente.” Mañana arranca en América “Va por vos”, un nuevo magazine con Guillermo Andino y Federica Pais. Será un programa periodístico con actualidad, servicios y espectáculos. La dupla acaba de irse del 13. El lunes pasado retornó al canal, en medio de internas, rumores y nervios, Jorge Lanata, que se puso al comando de “Detrás de las noticias”, del que eyectaron Adrián Paenza y Marcelo Zlotowiazda. También mañana vuelve “Después de hora” con Daniel Hadad a la medianoche. En marzo, en tanto, regresa “TV Registrada”.
La sobrevaluación de los programas periodísticos de estos últimos meses y el hecho de que por primera vez América pudo superar a su competidor Azul Televisión en las mediciones trajeron algunos cambios. El canal de Avila, que tenía previsto el aire de “La cornisa” para marzo, apuró a su conductor, Luis Majul, para que el ciclo comience pasado mañana. Por otro lado, cada vez se hace más concreta la idea de un programa que conducirían Adrián Paenza y Marcelo Zlotowiazda y que según ciertos rumores también contaría con la presencia de Ernesto Tenembaun. Por último, en las últimas horas se hablaba de Mauro Viale como posible reemplazante de Lucho Avilés, que se fue de “Indomables” en circunstancias poco claras.
“Me da la sensación de que la gente tiene mucha más necesidad de saber”, piensa Ulanovsky. “Si partimos de aquella conocida y útil definición de noticia, donde noticia es todo aquello que contribuya a modificar la vida de las personas, hoy toda información que provenga del mundo financiero o económico es cosa que puede llegar a modificar nuestras vidas y muy profundamente. Hay hambre de información y los medios en general van atrás de las necesidades de la gente”.
La televisión, se sabe, no es ajena en absoluto al clima económico. Es probable que sea la última en contagiarse, pero no se salva, y cuando el virus pega fuerte finalmente cae en cama. No hay plata, no se consume, las empresas reducen el presupuesto publicitario, los canales no pagan y la cadena continúa resquebrajándose. El bajo presupuesto será una de las pautas a seguir en la nueva programación posverano. Si eso redundará en un aumento de la cantidad de programas pertenecientes a lo que vulgarmente se llama “TV” todavía está por verse. Las opiniones, en este sentido, están encontradas. Ulanovsky afirma: “Más allá de que la televisión hace todo lo posible por distraer a la gente, por darle caminitos de diversión, la gente está reaccionando. Ni se acuerda de la frivolidad de la época menemista. Quiere saber si puede afrontar lo que esta ocurriendo.” Por otro lado, Rodríguez Arias discute con esa idea: “Los programas más frívolos siguen funcionando. Para un tipo que viene con la cabezaarruinada de trabajar, ver el programa de Jorge Rial a la noche está muy bien. Están funcionando los programas de Rial y de Georgina. Están funcionando mejor de lo que funcionaban a la tarde. El boludeo es necesario para la gente. Es el escape, un escape en cierto punto necesario”. En definitiva, a la televisión le espera este año un ajuste nunca antes visto. La tendencia será abaratar al máximo los costos. Tanto que hasta “Todo x 2 pesos” resultaría hoy demasiada inversión para llevarlo a la pantalla.