ESPECTáCULOS
Una lucha incansable, con pasado, presente y futuro
Una muestra que se desarrolla en el Centro Cultural Recoleta repasa la trayectoria de las Abuelas de Plaza de Mayo. Incluye fotos, historias de vida y detalles de una búsqueda que continúa.
Por Oscar Ranzani
Desde hace veinticinco años las Abuelas de Plaza de Mayo vienen trabajando activamente en la búsqueda de 500 chicos apropiados por los militares durante la dictadura. Su incansable tarea permitió que 73 jóvenes recuperaran su identidad. Además, las Abuelas facilitaron la creación de un Banco Nacional de Datos Genéticos, creado por ley, y allanaron el camino en términos legales a partir de la incorporación del derecho a la identidad a la Convención Nacional del Derecho del Niño, aprobada por la ONU. Estos datos representan sólo una parte de la muestra “Abuelas de Plaza de Mayo: el porvenir de su lucha” que se está exhibiendo en la Sala 5 del Centro Cultural Recoleta (Junín 1930). Allí hay extenso recorrido por el pasado, presente y futuro de la agrupación presidida por Estela Carlotto, quien desde su lugar se convirtió en un referente ineludible de los derechos humanos.
La exposición incluye una serie de carteles, que se agrupan en la muestra de acuerdo con items determinados: “Las Abuelas”, “La lucha de las Abuelas”, “Los nietos”, “Los niños apropiados”, y “Los padres desaparecidos”. “`Vas a ser abuela’, les dijeron alguna vez a cada una. La ilusión de ver crecer al nieto se convirtió en la pesadilla de saber que crecía entre extraños”, comienza el texto de la sección “Las Abuelas” que está acompañado por una foto en la que abuelas y nietos soplan las velitas de una torta por los veinticinco años de la agrupación. Al lado hay un cartel que describe las distintas etapas por las que fueron atravesando.
“La lucha de Abuelas tiene la edad de sus nietos. Cuando empezaron a caminar comisarías, cuarteles, ministerios, iglesias, tribunales, despachos de dirigentes políticos, plazas, ignoraban la senda que estaban trazando. Creían estar reclamando solo aquello por lo que les resultaba natural reclamar: sus hijos, sus nietos”, indica el cartel “La lucha de las Abuelas” acerca de su riesgosa búsqueda emprendida durante la dictadura. Y en democracia “siguieron caminando: despachos de civiles, no menos cínicos muchos de ellos que sus antecesores militares”, destaca. Pegado a este texto hay una especie de panel con las fotos de los rostros de todas las Abuelas de Plaza de Mayo y una muy significativa del 21 de abril de 1978, que es uno de los primeros registros fotográficos de las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo.
Al lado de una imagen que registra la celebración de los 20 años de Abuelas de Plaza de Mayo se encuentran los textos “Los nietos” y “Los niños apropiados”. Este último subraya: “Niños y niñas cargados en camiones militares junto con las heladeras, los muebles, los juguetes (...). Bebés paridos por madrecitas esposadas y encapuchadas sobre mesas custodiadas por médicos torturadores”, denuncia el escrito.
Un amplio sector de la muestra está formado por una serie de afiches colgados. El primero de ellos se titula “Desaparición” y refiere la primera localización que lograron las Abuelas. Tiene una breve historia del logotipo de la asociación, producto del dibujo realizado por una niña de 5 años. Otro afiche se titula “Búsqueda”. Allí está impresa la Declaración de Abuelas de Plaza de Mayo. “Restitución” explica el aspecto jurídico que implica la búsqueda de la identidad y narra las dificultades que tuvieron y tienen las Abuelas en las tramitaciones de los juicios y la resistencia que existe en algunos sectores frente a esta lucha.
“Genética” menciona la creación del primer Banco de Datos de ADN mitocondrial y da una idea del larguísimo camino recorrido por las Abuelas en el mundo, tratando de saber si existía algún método para determinar la filiación de un niño en ausencia de sus padres. Se encontró un método que tiene un 99% de eficacia probada. Otro afiche, “Derechos del niño”, expone la Convención Internacional sobre los derechos del niño adoptada en el año 1989 por Naciones Unidas, que fue incorporada a la Constitución Nacional en 1994. Hace hincapié en los artículos referidos a la identidad, conocidos como los artículos “argentinos”, a causa del trabajo de las Abuelas en este tema. Otro afiche, “Identidad”, brinda una definición profunda sobre el significado y la importancia de esa palabra. También hay un escrito titulado: ¿”Qué es ser un chico desaparecido?” “Y ahora ellos buscan su identidad” es el nombre del afiche que subraya algunos casos y en el que se explica el “Proyecto de reconstrucción de la identidad de los desaparecidos. Archivo biográfico de Abuelas de Plaza de Mayo”, producto de un convenio de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y la Carrera de Trabajo Social de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.
El último afiche es “25 años de lucha de Abuelas”, que aborda dos aspectos. Uno de ellos, “Justicia”, detalla los antecedentes de los militares detenidos por el robo de bebés y explica el plan sistemático emprendido por los genocidas para la apropiación de hijos de padres en cautiverio o asesinados. El otro, “No te quedes con la duda”, remarca la legitimidad de la identidad de una persona. Entre las curiosidades de la exposición hay distintas acreditaciones de Abuelas, que dan una idea del incansable recorrido que emprendieron por el exterior como referentes de la lucha por los derechos humanos. Al lado de una imagen de las abuelas con Fidel Castro hay una otra con el papa Juan Pablo II.