ESPECTáCULOS
“Operación Masacre” en cine treinta años tarde
A tres décadas de su estreno clandestino, el Malba ofrece hoy y el jueves las últimas dos funciones del film maldito de Jorge Cedrón basado en la obra del escritor y periodista Rodolfo Walsh.
Por M. B.
Treinta años después de haberse estrenado en clandestinidad, Operación Masacre, la película de Jorge Cedrón basada en el libro de Rodolfo Walsh, volvió a proyectarse con gran éxito durante mayo en el cine del Malba. Y todavía quedan dos oportunidades para ver la película más conocida de Jorge, el hermano del “Tata” Cedrón: hoy a las 20 y el jueves a las 22. Según distintas versiones, el film fue visto en la ilegalidad por cerca de un millón de personas en el ‘70, en barrios, villas y zonas marginales. Con una nueva copia, financiada por el Incaa, el film fue parte de una retrospectiva sobre la obra de Jorge Cedrón que se vio aquí durante el quinto Festival de Cine Independiente de Buenos Aires y está por emigrar al Festival de Huesca, en España. Cedrón fue asesinado en 1980 en una comisaría de París, muy probablemente por gente del Centro Piloto de París en el marco del Plan Cóndor.
La historia de la reposición tiene que ver con su hija, Lucía Cedrón, quien decidió radicarse hace un año en la Argentina después de 26 años en el exilio. Hace más de un año, cuando ella estaba aquí, el historiador Fernando Martín Peña programó una copia vieja de Operación Masacre para un ciclo de cine. Nada auguraba una buena concurrencia: era un día de semana, en una sala de cine arte en el centro, en un horario laboral y sin mucha difusión. Pero esa tarde, otra vez, el público se quedó en la vereda porque se agotaron las entradas. Eso inspiró a Lucía –que hace poco ganó un Oso de Plata en el Festival de Berlín por su corto En ausencia– a programar las películas anteriores e intentar con esa recaudación pagar una nueva copia.
“Es una metáfora de la historia de Jorge Cedrón, cuyos films siempre se han visto en circunstancias difíciles y marginales”, cuenta Lucía a Página/12. Jorge comenzó a hacer cine en la década del ‘60, “no para dirigirse sólo a ciertos círculos de entendidos, sino para sortear las barreras impuestas por los mecanismos del sistema”, dice su hija. “Me llamo Jorge Cedrón, soy argentino, vivo de hacer cine. Me dicen Tigre porque parece, que de chico, yo era un poco rayado. Nací en Buenos Aires, el 25 de abril de 1942. Menos de vigilante, hice de todo”, se presentó a sí mismo alguna vez.
La historia de Operación Masacre, que relata el asesinato a sangre fría de un grupo de militantes en el basural de José León Suárez en 1956, comienza, antes, con otra película sobre la figura de San Martín. El asesinato de militantes de la resistencia peronista fue genialmente retratado por Rodolfo Walsh, y fortaleció el género de nuevo periodismo en el país. Con su habitual cara de hombre fresco, Cedrón habia logrado arrebatarles al Banco Ciudad y al Instituto Sanmartiniano fondos para hacer un documental sobre San Martín, cuyo guión sería escrito, bajo seudónimo, por cuadros de la izquierda peronista. Y logró, incluso, que el general Lanusse asistiera al estreno de Por los Senderos del Libertador, tal el nombre de la película.
“En el estreno le sacaron una foto abrazado a Lanusse y él llevaría consigo esa revista todo el tiempo durante la filmación clandestina”, cuenta Lucía. Ese contacto con las Fuerzas Armadas le permitió conseguir armas y trajes de época (“para hacer unas pruebas”, les mintió Cedrón) y filmó en la clandestinidad, con una estructura de cooperativa. Julio Troxler, uno de los sobrevivientes de la masacre, actuó de sí mismo. “Pero cuando las cosas se ponían complicadas, Carlos Carella y Víctor Laplace daban la cara o salían a firmar autógrafos para sostener la coartada de estar realizando films publicitarios.” El elenco incluía también a Norma Aleandro, Walter Vidarte, Ana María Picchio y tenía narración de Julio Troxler, sobreviviente y actor de sí mismo. Además, el actor Pablo Cedrón debutaría en ese film.
La película tardó tres meses en rodarse. ¿Cómo consiguieron un basural clandestino? En eso intervinieron algunos de sus hermanos quienes, según otro mito popular que corre en el mundo del cine, se levantaron a una “mina cajetilla” que tenía una finca y la convencieron de que los dejara usarla sin demasiadas preguntas. En 1971, filmar una película sobre un hecho de 1956 era, en definitiva, hacer una película de época. Y era Julio Plaqué quien tenía su baúl lleno de armas y trajes de época y transpiraba cada vez que pasaba cerca de algún control policial.
Jorge Cedrón se fue del país el 22 de agosto de 1976, junto a sus dos hijos y su mujer. En Francia hizo otros dos trabajos antes de ser detenido en una comisaría: uno fue el documental, financiado por Montoneros, que era una extensa entrevista con Mario Firmenich y otro documental sobre tango llamado Gotan. Varios de los integrantes de la película tuvieron un final trágico. Julio Troxler fue asesinado por la Triple A, Cedrón fue muerto en París y Walsh murió un año después del golpe.