A los 66 años de edad Valerio Fuenzalida, chileno de nacionalidad y amplio conocedor de la realidad latinoamericana, es un estudioso-pragmático de la televisión. Tomando siempre prudente distancia de quienes sostenían la influencia determinista de los emisores sobre las audiencias, desde los años setenta Fuenzalida se especializó en la “recepción crítica de la televisión”, realizando tareas de investigación desde Ceneca, una organización no gubernamental con sede en Santiago de Chile. Después se metió directamente en la industria y desde 1989 hasta el 2001 fue jefe del Area de Estudios Cualitativos de la Televisión Nacional de Chile. Tiene quince libros publicados y más de cincuenta artículos sobre televisión y medios, es productor de televisión, investigador, trabaja como consultor privado especializado en televisión y es docente en el Instituto de Estudios Mediales de la Universidad Católica de Chile.
Vino a Buenos Aires invitado por La Tribu/medios/comunicación/cultura para dictar un seminario sobre televisión pública. Apelando a una frase que atribuye a un amigo suyo reivindica el “utopismo pragmático”. “Porque hay muchos ideales que lograr, porque hay muchos problemas no resueltos en América latina. En ese sentido el utopismo permanece –dice–, pero la exigencia de hoy es ser pragmático, buscando las formas de gestión, de administración, de planificación que permitan concretar las cosas que queremos.”