“Más allá de todos los ataques que recibí, el debate que se generó en torno de este tema me pareció saludable. La discusión sobre el rol que deben ocupar los medios públicos en la sociedad argentina nos saca, de alguna manera, de la soledad que sentimos algunos cuando nos preguntamos qué son los medios públicos y qué rol deberían tener. Es la primera vez que tenemos la posibilidad real, sin aprietes ni suspicacias, de discutir este problema. A lo largo del tiempo, especialmente durante los ’90, se privatizó y subjetivizó la función del canal público. Hay que volver a reconstruirlo. Ahí es donde tenemos que dar la batalla. El canal público debe tener un perfil amplio que aglutine la diversidad de intereses que se extienden en el territorio argentino. A lo que apuntamos es a que tenga información, formación y entretenimiento en partes iguales. Pero no es fácil. Eso lo logra la BBC, pero acá no se puede hacer un canal así porque la Argentina no es Inglaterra. En un país con nuestras dificultades no podemos cobrarle un impuesto a la gente para destinarlo a la TV pública.”