ESPECTáCULOS
• SUBNOTA
La inversión en cultura
–Como consumidor cultural, ¿cómo percibe el andar cultural argentino?
–Es el esfuerzo sostenido de gente que no tiene acompañamiento: fundaciones, asociaciones deficitarias que dependen del bolsillo de la gente... El Estado es bastante desertor en términos culturales. Aunque no totalmente, porque en la Capital hay que reconocerle a los gobiernos últimos una preocupación e inversión en cultura, a partir de la fuerte demanda. Es muy probable que haya gran disparidad de presupuestos entre lo que la Capital y otros municipios invierten en cultura.
–Tampoco hay apoyo de las empresas privadas...
–No acompañan porque veníamos de la etapa de gran insolidaridad de este capitalismo salvaje, que generó que en el país haya empresas que no tienen responsabilidad ética con nuestra sociedad: tienen responsabilidades con las sociedades de sus países madre. Si dos tercios de las 500 principales empresas pasaron a manos extranjeras, significa que hay gerentes que cuando se les pide apoyo responden que deben consultar con Hamburgo, Amsterdam o Washington. El país podría estar mejor y demanda estar mejor porque hay gente con una tremenda avidez cultural. Pero no hay un proyecto cultural nacional integral, porque si no tendría que estar orientado a las bases, no a los que ya estamos orientados en nuestra necesidad cultural.
Nota madre
Subnotas