Un movimiento de médicos especialistas en salud mental salió a defender públicamente la aptitud de los psicólogos para ocupar cargos de jefatura. Los profesionales contradicen así la posición de una entidad médica que había impugnado concursos ganados por licenciados en psicología en el Centro de Salud Mental Ameghino. “No podemos avalar con nuestro silencio que en nombre de la medicina o de organizaciones profesionales médicas se atente contra la legislación vigente”, afirma la declaración llamada “No en nuestro nombre”, que está abierta a más firmas en distintas instituciones. “Convocamos a nuestros colegas a manifestarse para evitar que las organizaciones que deben representarnos realicen en nuestro nombre una política corporativa injusta y anacrónica”, proponen estos médicos.
La declaración dice: “Deseamos dejar sentada nuestra posición ante el hecho de dominio público: la impugnación de los concursos realizados en el Centro de Salud Mental Nº 3 Arturo Ameghino. Con preocupación nos hemos enterado de que, con el respaldo de diversas asociaciones profesionales, se han interpuesto recursos tendientes a evitar la asunción de psicólogos a cargos de jefatura legítimamente concursados con el anacrónico argumento de que dichos cargos debieran ser ejercidos sólo por profesionales médicos.
Tal como lo expresa claramente la ley Nº 448 de Salud Mental (art. 2º inc. D), se trata de un campo de prácticas eminentemente interdisciplinario. En él convergen diferentes enfoques profesionales que han ampliado la delimitación y los abordajes del sufrimiento humano, donde las dimensiones biológicas son inseparables de las culturales y epocales. Trabajar con sujetos, familias, grupos o comunidades desde perspectivas diversas es una tendencia irreversible en todo el mundo.
Descalificar o impugnar a profesionales en base a sus incumbencias es dejar de lado lo que debiera priorizarse: las competencias personales y profesionales, así como la apertura a saberes pertenecientes a diversos campos disciplinarios de quienes sean concursados y seleccionados para ocupar cargos de conducción. No podemos avalar con nuestro silencio que en nombre de la medicina o de organizaciones profesionales médicas se atente contra la legislación vigente y se impugnen decisiones que se encuentran en consonancia con las más modernas concepciones de Salud Mental.
Convocamos a nuestros colegas, pertenecientes o no a las instancias que llevan adelante esta impugnación, a manifestarse para evitar que las organizaciones que deben representarnos realicen en nuestro nombre una política institucional corporativa tan injusta como anacrónica.”
Entre los firmantes están F. Aberastury, R. Avenburg, D. Avila, L. Belmonte, O. Biscotti, C. Borensztejn, R. Canovi, L. Curculio, P. Dayan, B. De Santos, A. De Gregorio, A. Ekboir, V. Esrubilsky, A. Fainstein, J. Fialk, E. Galende, V. Galli, T. Gelbert, R. Goldstein, A. Grande, S. Grinstein, J. Gutman, L. Herrendorf, M. Hirsch, G. Jarast, J. Komel, Horacio Magay, Gloria Mc Loughlin, Julieta Olivieri, Juan C. Pascale, I. Pelsajovich, María Pérez, L. Piedrarita, S. Ragatke, A. Rascovsky, S. Rasmi, M. Lourdes Rey, C. Rosenblit, I. Sapoznicoff, A. Sciammarella, C. Toporosi, M. Treibel, J. Vasen, G. Ventrici, M. V., A. Zanone.
Los médicos que deseen firmar pueden acercarse en febrero o marzo a las entidades que conforman el Foro de Instituciones de Profesionales en Salud Mental: AEPA, Rivadavia 3729, 4982-2485; ASIBA, Pueyrredón 1051, 49634768; AAPPG, Arévalo 1840, 4771-0247; APBA, Avda. de Mayo 950, 4345-7359; APdeBA, Maure 1850, 4775-7867; AP, Pueyrredón 1504, 4822-7410; AEAPG, Julián Alvarez 1933, 4865-2050; AGBA, Gurruchaga 1168, 4772-9865; Consejo de Graduados en Trabajo Social, Bmé. Mitre 1741, 4371-1273; CIAP, Charcas 4729, 4773-8336; Atico, Teodoro García 2574, 4553-3800; Centro Oro, Güemes 4710, 4773-8289; APA, Rodríguez Peña 1674, 4812-3518; SATF, Larrea 716, 4962-4306; SAP, Thames 620, 4854-8742.