La noticia había quedado en la memoria sin muchos detalles: el gobierno porteño había liberado el estacionamiento en la ciudad para favorecer las compras de Navidad y fin de año. Ayer a la mañana, las imprecisiones resultaron caras para los automovilistas que dejaron estacionado el auto desde temprano. El libre estacionamiento sólo rige a partir de las 11, por lo que las grúas se llevaron cientos de autos y las playas de infractores no dieron abasto para tanto incauto conductor. De nada valieron gritos y discusiones. Hubo que pagar como cualquier hijo de vecino el acarreo para sacar el vehículo. Y habrá que pagar la multa como cualquier infractor.

El hecho de que la liberación del aparcamiento en la mayoría de las calles, dispuesto desde el 24 de este mes y hasta el 6 de enero próximo, rija solamente desde las 11 y hasta las 21, y no todo el día, como cabía suponer, fue el motivo por el cual muchos se vieron sorprendidos por las multas que les aplicaron. La prohibición de estacionar en los lugares señalizados rige para los días hábiles desde las 7 hasta las 21.

A la mañana, las playas de guarda de vehículos incautados de la empresa Servicio de Tránsito Ordenado (STO) estaban atestadas de vehículos cuyos propietarios, que debían pagar 190 pesos para recuperar sus autos, reclamaban por creer que el acarreo había sido injustificado debido a la vigencia del libre estacionamiento, hasta que se les informaba que éste sólo regía para el horario de 11 a 21.

La medida fue expresamente dispuesta para facilitar las actividades comerciales, en medio de la crisis de ventas y para favorecer a los comercios en las fiestas de fin de año, pero no para beneficiar a los trabajadores de otras actividades. El comunicado difundido al anunciarse la norma la semana pasada por el ministerio de Desarrollo Urbano explica que “el objetivo del Gobierno de la Ciudad es colaborar con la actividad comercial durante las festividades de Navidad, Año Nuevo y Reyes, en especial para favorecer aquellos negocios que no cuentan con estacionamiento propio”.

Siguen vigentes las normas que prohíben estacionar frente a las paradas de colectivos, sendas peatonales, rampas para discapacitados e ingresos a garajes. Además, en el caso de las zonas donde haya parquímetros, las tarifas deberán ser abonadas como de costumbre y en aquellas arterias que tengan carriles exclusivos para transporte público (Entre Ríos, Callao, Córdoba y Pueyrredón), el estacionamiento continuará prohibido sobre la mano derecha.

El texto señala también que “hay algunas avenidas que, por su complicada circulación, no están contempladas dentro de la medida de libre estacionamiento”. Estas avenidas son: Ingeniero Huergo y Eduardo Madero, 9 de Julio, Perito Moreno, La Rábida y calzadas centrales de las avenidas Leandro N. Alem, Paseo Colón y Sáenz.