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La Policía Civil de investigaciones (PDI) chilena comunicó ayer que cinco de sus miembros, denunciados en un reportaje de televisión por pertenecer supuestamente a una red de prostitución infantil, fueron suspendidos hasta que el Ministerio Público dilucide el caso. El martes pasado, Canal 13 de Chile en uno de sus ciclos televisivos (Contacto) identificó a los policías Jorge Gallardo, Claudio Cortés, Sergio Jarpa, Edgardo Uribe y Alejandro Puga como clientes del hotel Lousiana y del Cabaret Pandemónium, en donde habrían tenido contacto sexual con menores de edad. Además, una de las jóvenes víctimas denunció en el programa que varios uniformados la intimidaron con el fin de que no denunciara los vínculos policiales con el caso.

El Canal 13 católico denunció en el programa Contacto la existencia de nexos entre policías del puerto de Valparaíso y una red de prostitución infantil en 2004, 2005 y 2006, período en el que varias menores de edad prestaron servicios sexuales a cambio de protección. El programa denunció a los policías Jorge Gallardo, Claudio Cortés, Sergio Jarpa, Edgardo Uribe y Alejandro Puga de haber sido clientes del hotel Lousiana y del Cabaret Pandemónium y haber tenido contacto sexual con menores de edad. Además, en el programa hubo testimonios que apuntaron a que el dueño de estos locales, Carlos Parra, llevaba menores de edad a los retenes policiales “a pedido” para hacer shows, consumir droga y tener sexo con los policías.

El reportaje mostró el caso de una de las jóvenes –actualmente de 18 años– que denunció que en marzo fue interceptada por un vehículo y golpeada como advertencia para que no hiciera denuncias. La joven y su familia solicitaron a la Justicia protección, recurso que fue rechazado. La Corte Suprema, sin embargo, revocó esa decisión.

El abogado de derechos humanos Hugo Gutiérrez denunció también que personal de la Armada ofreció niñas y niños a uniformados extranjeros que participaron en la Operación Unitas. En tal sentido, la Marina informó a través de un comunicado que realiza una investigación interna al respecto y que, de comprobarse los delitos, se actuará con el máximo rigor.