Familiares y allegados de Erica Soriano, la joven embarazada que desapareció hace un año, se manifestaron en el partido de San Isidro para reclamar justicia, repudiar la violencia de género, y volvieron a señalar a la pareja de la mujer, Daniel Lagostena, como responsable de la desaparición. A pesar de que se realizaron varios allanamientos, exhumaciones de cadáveres, indagatorias y rastrillajes, no hay datos concretos sobre el paradero de la joven. Para Verónica Soriano, la principal hipótesis es que su hermana está “privada de la libertad”, víctima de una red de trata.

La hermana de la joven desaparecida apuntó contra la fiscalía que lleva adelante la investigación, por haber rechazado el pedido de la familia para que Lagostena (51) sea citado a declaración indagatoria. Además, los familiares de Soriano habían solicitado que al hombre se le cambie la figura en la causa, y pase de testigo a ser considerado como sospechoso. Según Verónica Soriano, el fiscal de Lomas de Zamora Gerardo Loureyro le había manifestado a su madre que si presentaban esos pedidos “los iban a aceptar”.

Por otra parte, la hermana de Erica dijo no tener expectativa sobre el cotejo de ADN de un cadáver “encontrado en Caseros en septiembre del año pasado”, y que “recién ahora” es estudiado por la fiscalía. “La buscamos viva”, remarcó.

Erica Soriano desapareció el 12 de agosto del año pasado, tras discutir con Lagostena en la casa que compartían en Lanús. Luego de ese episodio, la joven se dirigía de ese partido, ubicado en el sur del conurbano, a Villa Adelina, en la Zona Norte, donde iba a visitar a su madre. Erica nunca llegó a la casa de su familia. Desde entonces, la mujer que en ese momento tenía 30 años, y cursaba el segundo mes de embarazo, nunca más fue encontrada.