La jueza de instrucción María Gabriela Lanz dio por concluida la investigación y requirió a la fiscalía que dictamine si corresponde elevar a juicio oral y público la causa en la que procesó al policía de la Federal Ariel Mendoza por el “homicidio culposo” de Ariel Domínguez. Mendoza declaró que el 20 de julio estaba de consigna en un edificio próximo a la esquina de Humberto I y la avenida Paseo Colón, San Telmo, cuando, al colaborar con un patrullero en la persecución de un delincuente, y mientras corría, se le cayó el arma reglamentaria que, dijo, se disparó sola al tocar el piso. El disparo impactó en la cabeza del joven de 22 años, que murió en el lugar.