El hijo del matrimonio gay argentino que alquiló un vientre en la India nació el viernes en una clínica de Nueva Delhi, pero no lo pueden traer de regreso al país. “Tobías está muy bien”, contó a Página/12 a través del teléfono Alejandro Grinblat, uno de los flamantes papás. A su lado, Carlos Dermgerd, el otro papá, acunaba al bebé, que dormía plácidamente después de tomar una mamadera. Hasta el nacimiento todo salió como estaba previsto, contó Grinblat. Pero sorpresivamente, en el consulado argentino en la capital india les están poniendo trabas para entregarles el DNI y el pasaporte para el niño, requisito indispensable para poder viajar a la Argentina, porque no figura una madre y, en cambio, tiene dos papás. “Se trata de un caso testigo: es la primera vez que una pareja de varones argentina recurre a la maternidad subrogada en ese país”, destacó el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez, quien los está representando legalmente. “Hay trabas burocráticas que deberían resolverse rápidamente”, consideró Gil Domínguez. Anoche, fuentes de la Cancillería dejaron trascender que en las próximas horas podrían dar una respuesta positiva al reclamo de la pareja.

La negativa que recibieron luego del nacimiento de Tobías los descolocó, dado que prácticamente desde el inicio del embarazo venían gestionando los trámites para la inscripción del bebé como hijo de ambos padres e incluso recurrieron a la Justicia porteña, donde obtuvieron un fallo que avaló su copaternidad. “Esperamos que algún organismo, poder o funcionario exija simplemente que se cumpla lo que fue establecido. No rogamos ni pedimos excepciones. Sólo pedimos justicia. Eso significa que sea escuchado el Poder Judicial, que sea respetado lo que dictaminó un juez y nos permita tener los derechos de un ciudadano argentino y de esta forma sentir que el Estado como tal existe y nos respalda, así podemos volver con Tobías a nuestra casa”, pidió Grinblat.

Las últimas trabas, apuntó Gil Domínguez, estarían en un dictamen de la Dirección de Asuntos Jurídicos de la Cancillería, que demandaría una orden del Registro Civil de la Ciudad para realizar la inscripción. “Si fuera una pareja heterosexual no tendrían este problema. Hasta les han dicho que no tienen formularios para anotar a dos padres”, agregó el abogado.

En el marco de la demanda judicial que iniciaron para allanar el camino del regreso de su hijo a la Argentina –tal como viene informando Página/12–, la jueza Elena Liberatori, del Fuero Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires, homologó el 22 de junio un acuerdo por el cual ordenó la inscripción bajo copaternidad del hijo por nacer en Nueva Delhi. El convenio fue firmado luego de que ese día se realizara una audiencia de conciliación en la que participaron Grinblat y Dermgerd; el subsecretario de Justicia del gobierno porteño, Javier Buján; una representante de la Asesoría General Tutelar, Angeles Casares Filgueiras, y la secretaria de asuntos jurídicos de la Federación LGTB, Flavia Massenzio. El documento, que tiene carácter de sentencia, según explicó Gil Domínguez, fue remitido al Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Argentina y al Registro Civil de la Ciudad de Buenos Aires. El reclamo del matrimonio cuenta con el respaldo del presidente de la Federación LGBT, Esteban Paulón. “Si hay un acuerdo judicial y un compromiso del Registro Civil de inscribir respetando la copaternidad, para que puedan traer a su hijo a la Argentina, con la protección de sus derechos, se le debería dar los documentos a Tobías”, señaló ayer Paulón, en diálogo con este diario. “Hay una dilación inexplicable del consulado, porque el fondo del tema ya está resuelto dado que el Gobierno de la Ciudad y los padres se pusieron de acuerdo”, agregó.

“Estaba todo previsto para que el bebé pudiera ser inscripto. Pero ahora la jefa de la Sección Consultar en Nueva Delhi, Eugenia Vijande, nos dice que está esperando instrucciones de Cancillería. Hay una burocracia que está frenando el trámite”, señaló Grinblat.

Mientras esperan ansiosos novedades para poder iniciar el regreso al país, donde los esperan sus familiares y amigos, los tres viven en un hotel. El bebé nació por cesárea el viernes en una clínica y el domingo fue dado de alta, con lo cual se lo pudieron llevar sus papás. Grinblat, de 35 años, y Dermgerd, de 41 años, habían llegado a la India el miércoles 27 y ahí se enteraron de que el nacimiento se adelantaría (ver aparte). En principio estaba previsto para mediados de julio. El jueves 28 se reunieron con Vijande, con quien ya habían establecido contacto un mes antes para ponerla al tanto del caso. “Un año antes, habíamos estado reunidos con la persona a quien ella reemplaza en el cargo, que fue quien nos dio instrucciones de judicializar el caso, según instrucciones que había recibido de Cancillería. Estábamos muy tranquilos dado que una semana antes un juzgado había dado la orden a Cancillería de inscribir a nuestro hijo bajo copaternidad y en la embajada encontramos todo el apoyo que un argentino espera tener en el exterior”, reseñó Grinblat. Pero en las últimas horas el panorama cambió. Ahora esperan que Cancillería y las autoridades del Registro Civil porteño se pongan de acuerdo para facilitar la documentación necesaria. Y poder emprender así la vuelta a casa.