SOCIEDAD
› EN EL CASO GARCIA BELSUNCE
Demoras de una pericia
Mientras trascendía el texto de la resolución del juez Diego Barroetaveña, que dejó en libertad a Carlos Carrascosa, el fiscal Diego Molina Pico se presentó en La Plata en busca de los resultados de las pericias del patrón genético de las muestras de sangre recogidas en la casa del Carmel. Pero no los obtuvo. El informe final fue postergado por un imponderable: la última secuencia del estudio quedó inutilizable. “Un perito de parte de la defensa trajo un reactivo que estaba contaminado”, reveló a Página/12 una fuente judicial.
Molina Pico recibió recién el lunes la notificación de la resolución del juez, y estima que el viernes presentará la apelación contra la libertad de Carrascosa. Ya conocido, el fallo del juez no abandonó su categoría de galimatías jurídico. En él, Barroetaveña consideró que el fiscal “no trabajó lo suficientemente duro” y las pruebas existentes no alcanzaban para mantener en prisión a Carrascosa. Una semana antes, había considerado esas pruebas como válidas al disponer su prisión preventiva. También había dicho que debía quedar preso para evitar una fuga.