Miles de manifestantes y activistas por la defensa de los derechos de los homosexuales marcharon ayer por la tarde en Nueva York para denunciar el asesinato de un joven gay el fin de semana en plena calle en el céntrico Greenwich Village. La víctima es Mark Carson, de 32 años, quien murió de un disparo en la noche del viernes al sábado a manos de Elliot Morales, de 33 años y que antes había lanzado injurias homofóbicas y amenazado de muerte al amigo de la víctima.

“Está claro que la víctima fue asesinada únicamente porque el agresor pensaba que era gay”, declaró el domingo el jefe de la policía de New York, Ray Kelly, insistiendo en el hecho de que Carson no había provocado a Morales.

El crimen ha causado una gran conmoción en la comunidad homosexual neoyorquina, especialmente porque fue cometido en un barrio de Manhattan conocido por su tolerancia y por ser la cuna del movimiento por los derechos de los gays.

La organización The Center, de defensa de los derechos de homosexuales, bisexuales y transexuales, convocó a una manifestación que se llevó a cabo el lunes por la tarde para “pedir el fin de los crímenes de odio contra nuestra comunidad y llorar la muerte de Mark Carson”.

La presidenta del consejo municipal y candidata a alcaldesa, Christine Quinn, de 46 años y homosexual, estuvo presente en la marcha, que terminó en el lugar donde fue asesinado Mark Carson, en la esquina de la Sexta Avenida y la calle 8.

“Nueva York es nuestra ciudad y no retrocederemos”, dijo la presidenta de Center, Glennda Testone. El autor del crimen fue detenido poco después del hecho y el domingo se lo inculpó formalmente.

Los derechos civiles de los homosexuales se encuentran desde hace meses en el centro de la atención pública en Estados Unidos. En total, doce estados, tres de ellos en las últimas semanas, han autorizado el matrimonio homosexual: Minnesota, Delaware, Rhode Island, Connecticut, Maine, Massachusetts, New Hampshire, Vermont, Nueva York, Iowa, Maryland y Washington. La capital federal estadounidense, aunque no es un estado, también legalizó el matrimonio para personas del mismo sexo.

La prohibición constitucional se mantiene en cambio en 31 estados en el país, mientras que se espera que la Corte Suprema de Estados Unidos dictamine en junio si la Ley de Defensa del Matrimonio (DOMA), la normativa federal que reconoce el matrimonio sólo como la unión entre un hombre y una mujer, es o no constitucional.