La crecida del río Uruguay, que llegó a 3 metros por encima del nivel de emergencia, dejó más de 7 mil evacuados y pérdidas millonarias este fin de semana, de acuerdo con las estimaciones oficiales, y puso en alerta a las autoridades de las provincias del Litoral. La situación más complicada se constató en Misiones, donde el gobernador Maurice Clos, declaró la emergencia económica y sanitaria, a la vez que calculó en 500 millones de pesos las pérdidas ocasionadas. En Corrientes más de 300 personas debieron abandonar sus hogares y en Entre Ríos, pese a no haber evacuados, se monitoreaba la situación. Por su parte, el río Paraguay continuaba creciendo en los puertos formoseños, pero las lluvias cesaron, facilitando las tareas de asistencia a los 6000 pobladores refugiados.

A raíz de la creciente de los ríos Uruguay e Iguazú, y desbordes de arroyos, más de 6 mil personas fueron damnificadas en Misiones. La mayoría debió dejar sus hogares para ir a refugios o casas de familiares. El parte oficial sobre las inundaciones en la provincia lo dio a conocer el gobernador Closs, a través de su cuenta en Twitter.

El informe detalló que en Misiones se debió relocalizar a 1267 familias y que el número de evacuados ascendió a 6210. Se inundaron 926 casas, 122 fueron destruidas y otras 1048 quedaron afectadas por las aguas. En igual sentido, el tránsito se vio dificultado por la crecida, varios puentes debieron ser cortados sobre la ruta costera 2 y la provincial 103, desde San Javier hasta Mosconi.

Closs, además, señaló ayer que, “si bien declaramos la emergencia económica en la provincia, es necesario un pronunciamiento nacional por la situación de desastre”. En algunos casos, subrayó, “ni siquiera por vía aérea podemos llegar a algunas localidades que están cercadas por el agua, debido al mal tiempo, pero el problema no solamente está en la zona ribereña del río Uruguay, sino en el interior del territorio por el embalsado de los arroyos”.

En ese marco, pidió “a la Nación el pago de una doble Asignación Universal por Hijo”, así como también “de recursos para el sector agropecuario y las tareas de reconstrucción de las redes viales, alcantarillas, puentes”.

“A vuelo de pájaro puedo decir que las pérdidas ascienden a unos 500 millones de pesos”, afirmó el gobernador. y afirmó que se prevé que hoy las aguas llegarán hasta la ruta nacional 14.

En Corrientes, tras el pico de creciente del río Paraná días atrás, ahora el avance del Uruguay afectó a las poblaciones ribereñas. Alrededor de 312 personas debieron abandonar sus hogares, entre evacuados y autoevacuados. El director de Defensa Civil de Corrientes, Eulogio Márquez, dijo que la creciente del Uruguay afectó principalmente a la ciudad de Santo Tomé. Allí unas 162 personas debieron ser socorridas por las fuerzas públicas, mientras que otras 150 personas también abandonaron sus hogares por sus propios medios. “Tenemos a 30 familias evacuadas y alojadas en la Escuela República Oriental del Uruguay 687 de Santo Tomé”, informó Márquez y precisó que son asistidos con racionamientos calientes y atención médica permanente.

Los 14,44 metros que registró el río ayer fueron considerados por el intendente de Santo Tomé, Víctor Giraud, como “históricos”, teniendo en cuenta que a los 11,50 se declara el alerta y 12,50 bastan para disponer la evacuación. Tal como calcularon en Misiones, desde la comuna correntina explicaron que “las estimaciones indican que mañana la altura superaría los 15 metros y el agua llegaría a la ruta 14”.

El avance del Uruguay sobre las costas correntinas también afectó a la localidad de Garabí, donde tres familias decidieron autoevacuarse, mientras desde el gobierno y el municipio local trabajaban para poner en funcionamiento una bomba de agua que había salido de servicio.

“El río sigue creciendo y es muy probable que pueda aumentar el número de familias afectadas”, aseveró Márquez, al tiempo que precisó que la situación es preocupante a la altura de Garruchos, donde el río superó los 17,70 metros y generó perjuicios a un grupo de productores rurales. Por otro lado, el titular de Defensa Civil aseguró que “el río Paraná también volvió a crecer”, aunque aclaró que se encuentra lejos de los niveles que se registraron a mediados de mes, cuando cientos de familias debieron abandonar sus hogares en las ciudades de Corrientes, Isla Apipé, Ituzaingó y Empedrado, entre otras.

Por su parte, en la provincia de Entre Ríos, el director de Defensa Civil, Roberto Destri, aseguró que si bien no había evacuados en la provincia, se monitorea la situación en forma constante. Asimismo, aseguró ayer que “para que haya evacuados en Concordia el río tiene que llegar a los 13 metros, y hoy estamos en 9,58”.

“Las lluvias que se anuncian para la semana no serían importantes, así que confío en que no tendremos mayores inconvenientes en las ciudades ubicadas sobre el río Uruguay”, añadió el funcionario y remarcó que “estamos siguiendo la situación de cerca y en contacto con las autoridades de todas las ciudades cercanas”.

En cuanto al incremento de los niveles del río Paraguay, los evacuados censados en la provincia de Formosa, alrededor de 6000, ayer ya estaban retornando a sus hogares ante el retroceso de las aguas. Lo mismo estaría ocurriendo con los autoevacuados, de los que no se tiene registro pero engrosarían notablemente las cifras oficiales. El pronóstico del tiempo descarta lluvias para los próximos días, después de varios días de temporal.