Un nene de 10 años fue rescatado ayer tras permanecer secuestrado 48 horas en un hotel de Constitución, donde fue hallado sedado y atado de pies y manos a una cama.

El jefe de la Policía Federal Argentina, Néstor Roncaglia, confirmó que por el caso hay dos prófugos y dos detenidas, una travesti peruana y una mujer paraguaya conocida de la familia de la víctima, que fue quien admitió ante los investigadores dónde tenían cautivo al niño.

El fiscal Carlos Stornelli, que encabezó el operativo de rescate, aseguró que durante los dos días que duró el secuestro hubo “al menos 30 llamadas extorsivas” y que el hecho de que una de las secuestradoras fuera conocida de la familia les generaba “una gran preocupación por la integridad física del menor”.

La víctima es un chico de 10 años, de familia paraguaya, que vive en la villa Zavaleta, de Barracas. Es hijo de la dueña de una parrilla y panchería que, según reveló un investigador, “va muy bien”.

El hecho se inició el lunes pasado alrededor de las 20, cuando el nene fue solo a un kiosco y la amiga paraguaya se acercó y se lo llevó con algún engaño. De inmediato comenzaron los llamados extorsivos, en los que se alternaban un hombre y una mujer.

La madre del chico hizo la denuncia y fue al sitio acordado para el pago, una esquina de Barracas. El fiscal dio la orden de cortar el pago y los efectivos de la PFA detuvieron a una travesti que fue a buscar el dinero.

Pese a la detención, los llamados extorsivos, realizados por un hombre, continuaron y se arregló un segundo lugar de pago, la esquina de avenida Garay y Tacuarí.

Allí se detuvo al segundo cobrador, que resultó ser Paola, la amiga paraguaya de la familia del nene. Esta mujer fue la que les indicó a los investigadores dónde estaba cautivo el chico: el hotel de Bernardo de Irigoyen 1328. La policía encontró al nene acostado en una cama, atado de pies y manos y tapado con una frazada. Luego se supo que también estaba sedado.

En tanto, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aseguró que se va a “frenar esta cantidad de secuestros” ocurridos en los últimos meses. “Los secuestros son una de las peores metodologías hacia la gente. Estamos trabajando en conjunto con la provincia de Buenos Aires y con la ciudad de Buenos Aires para la parte preventiva”, dijo. Y explicó que “es una metodología nueva” y que los secuestros de ahora no son como antes, cuando “las personas eran secuestradas y daban un tiempo para poder encontrar el lugar. Ahora se hacen cambiando de auto en auto (a la víctima) y en una rapidez de cinco a quince minutos”.

Por último, afirmó que “no se ha visto que haya un sector policial” vinculado con los secuestros, y anunció que “se está haciendo una tarea de inteligencia criminal para lograr ver las relaciones de las bandas que están trabajando en este tipo de crímenes y delitos”.