SOCIEDAD
ABRIL
Desesperado, al borde del quiebre ante la demora en la llegada del corazón que pueda salvar la vida de su beba Abril, Sergio Dispenza –que no había solicitado audiencia– cruzó esta mañana Plaza de Mayo hacia la Casa Rosada a pedir personalmente ayuda al presidente Néstor Kir- chner, quien se comprometió a darle todo el apoyo necesario. “Me habló como un padre y se comprometió a hacer todo lo que esté a su alcance para ayudar a Abril”, señaló Dispenza y agregó que Kirchner le dio “exactamente la respuesta que fui a buscar. El no puede darme un corazón, pero sí el apoyo para que este tema tenga difusión y se facilite la llegada de la donación”. Del encuentro también participó el ministro de Salud, Ginés González García.