En Catamarca, dos hombres fueron condenados a siete y seis años de prisión efectiva por abusar sexualmente de dos niñas, una de las cuales quedó embarazada producto de la violación. La Cámara Penal Nº 3 condenó a siete años a un comerciante de apellido Llampa, quien abusó reiteradamente de una niña de 11 años, mientras que la Cámara Nº 1 hizo lo propio con un hombre apellidado Agüero, que fue sentenciado a 6 años por violar y embarazar a su sobrina menor de edad. Llampa fue condenado por “abuso sexual gravemente ultrajante”, y el fiscal solicitó que sea reevaluado si corresponde que continúe gozando del beneficio de la prisión domiciliaria, que logró por presuntos problemas de salud.

Agüero fue sometido a juicio oral, no público –para preservar la identidad de la niña– bajo tres cargos, pero luego el fiscal desestimó dos y sólo se lo juzgó por “abuso sexual agravado por el vínculo”.