SOCIEDAD › MUCHOS CREEN QUE EL CAMBIO DE CLIMA NO LOS AFECTA
Inicia la cumbre climática
Una encuesta oficial revela que el 75 por ciento considera el tema como muy importante, pero el 58 supone que el cambio no lo afecta.
Una encuesta, elaborada por un organismo dependiente de Presidencia de la Nación, en el marco de la 10ª Conferencia Mundial sobre Cambio Climático que comienza hoy en la Ciudad de Buenos Aires, revela que sólo el 12,7 por ciento de la población reconoció estar al tanto de la realización del evento más destacado sobre el tema en el orden internacional. No obstante, un 75,6 por ciento consideró al cambio climático como un hecho “muy importante”, aunque el 58,2 sostuvo que el clima no lo afecta en su vida personal. Consultado por Página/12, el ministro de Salud, Ginés González García, evaluó como interesante que, más allá de la cumbre, al menos exista algún tipo de “percepción” sobre los cambios climáticos. El sondeo se hizo entre 500 personas que viven en Capital Federal y el conurbano.
“Creo que, como el clima, las cosas están cambiando”, evaluó el ministro en diálogo con este diario, mientras recorría anoche las instalaciones de la Rural donde a las 10 de la mañana de hoy presidirá la inauguración oficial de la cumbre. “Naturalmente –continuó–, la gente aún tiene una idea de que los cambios climáticos no tienen que ver con nosotros, por eso pensamos en el slogan de ‘para cambiar el clima, cambiemos nosotros’. Aunque las responsabilidades no son iguales, todos somos responsables de esos cambios.”
El sondeo indica que el 70 por ciento que evaluó como “muy importante” al cambio climático admitió que la problemática afecta la salud y repercutirá negativamente en el planeta y en el futuro. En tanto, para el 25,3 por ciento el tema tiene “poca o ninguna” importancia y arguyeron razones personales: “Hay preocupaciones más importantes” o que “posee los medios disponibles para tolerar” esos cambios.
Los datos de la encuesta reflejan algunas preocupaciones típicas de la condición de habitantes metropolitanos. Para el 39,3 por ciento de los encuestados, el smog es el principal problema ambiental. Para el 25,3 es el ruido y para un 18,1 la contaminación de las aguas. Problemáticas como la contaminación industrial, basura en las calles, tala de árboles, el agujero en la capa de ozono quedaron en segundo plano. Y aunque es una cuestión puesta frecuentemente en tela de juicio, el problema de los cigarrillos en lugares públicos fue el menos citado por los encuestados.
Sobre las variaciones climáticas, el 92,9 por ciento cree que el clima se alteró en los últimos años; el 6 por ciento cree que no. Las explicaciones admitidas por la mayoría fueron semejantes: “El verano es más caluroso” (41,9 por ciento) y “el invierno no es tan frío’ (39,9). Por debajo de la mitad están los que opinan que “el invierno es más corto”; sólo el 13,4 por ciento notó “cambios bruscos de temperatura” y el 5,5 cree que “las estaciones no son tan marcadas”.
Sorprendentemente, una amplia mayoría, el 58,2 por ciento, dice que esos cambios “no lo afectan”. Las justificaciones que dieron fueron marcadamente personales: “me adapto al clima”, dijo un cuarto de los consultados; “el clima no afecta mis actividades”, “cambio de ropa según el clima” y esos cambios “van a afectar en el futuro, no ahora”, admitió el resto.
La otra cara de estas últimas consideraciones la mostró el 40 por ciento que afirmó que las afecciones del cambio climático fueron “muchas” o “bastantes”. De estos, poco más de la mitad reconoció que los vaivenes del clima “traen aparejado enfermedades”; y muy por debajo, el 15,3 por ciento opinó que por culpa de estas transformaciones “no se puede prever cómo vestirse”. Sólo a un 4,3 le preocuparon las “graves consecuencias en el futuro”.