SOCIEDAD
Las empresas recolectoras de basura estrenaron con un papelón
Los porteños empezaron el día con enormes pilas de basura, especialmente en los barrios del Centro, Sur y Palermo. Las empresas ahora no cobran por tonelada sino por zona limpia. Según los resultados de la recolección del primer día, más que cobrar deberán pagar.
El amanecer porteño de ayer no dejó a la vista sólo las resacas del Carnaval. Se le sumó la siempre probable imperfección humana, esta vez en la inauguración del contrato del gobierno comunal con las empresas recolectoras de residuos. Argumentando no conocer los caminos asignados a la junta de basura, las empresas terminaron de limpiar la ciudad entrada la tarde. Las dos más remolonas, Cliba y Urbasur, tendrán que pagar multas que llegarían a los 20 mil pesos, según adelantó a Página/12 la Secretaría de Medio Ambiente porteña. Por más que cambiaron su participación accionaria, la mayoría de las empresas trabajan en Buenos Aires desde hace varios años. La ambientalista Greenpeace consideró “insuficiente” el plan gubernamental para que algún día en Buenos Aires se recicle toda la basura.
Esta consigna, sostenida en el nombre del plan Basura Cero, provocaba cierta mirada irónica como sentimiento más positivo en quienes sufrieron en vereda propia el aroma de las bolsas. Los Centros de Gestión y Participación 1, 2 y 3 aglutinaron la mayor parte de quejas por lo desagradable del servicio, que afectó a Palermo, San Telmo, Colegiales, Belgrano, Núñez, Villa Soldati, Pompeya, Parque Chacabuco, Caballito, Almagro, Boedo, San Cristóbal, La Boca, Barracas, Montserrat, Balvanera, Constitución, Puerto Madero, Recoleta, Retiro, San Nicolás y Caballito.
Como atenuante al primer incumplimiento del nuevo contrato, las adjudicatarias tuvieron a favor la celebración de los corsos en varios puntos de la Capital. Además, el sábado, “como es habitual, no hay recolección, lo que provoca que la madrugada del domingo sea un momento crítico”, se justificó Cliba, una de las multadas, a través de un escueto comunicado. Desde el gobierno porteño señalaron que “todas las empresas de las cinco zonas tuvieron algunos inconvenientes en la recolección, por lo que la Secretaría de Medio Ambiente las emplazó a solucionarlos antes de las 14.30 de hoy”. Pero “las encargadas de las zonas 1 y 3 no lo hicieron en este plazo, sino que completaron la tarea a las 18, por lo que fueron sancionadas”, indicó la misma fuente y agregó que “las empresas adujeron que el cambio de recorridos, de falta de acostumbramiento de los choferes a las manos de las calles fue, entre otras causas, lo que provocó las demoras”.
Desde la secretaría, comentaron a este diario que “algunas de las que tenían que terminar la recolección a las 6 de la mañana terminaron a las 9”. Entre estas se encuentran las empresas Aesa, que ocupa las zona 2, integrada por el CGP 13, 14 oeste y 14 este; Nítida, que limpia la zona 4, compuesta por los CGP 7 y 10; e Integra, de la zona 6, comprendida por los CGP 11 y 12. Pero Cliba, de la zona 1, y Urbasur, de la zona 3, fueron inspeccionadas luego de las 14.30 para que los funcionarios municipales constataran que “volvieron a incumplir”. Por eso las multas. El argumento del desconocimiento del camino “es comprensible, pero tendrían que haber tomado algunas prevenciones lógicas” para que llegado el día las nuevas empresas no empezaran con malas notas, dijeron desde la dependencia.
Según la secretaría, “todas las empresas son nuevas porque su conformación societaria es distinta”. Y remarcaron que “todas tienen recorridos distintos”. Pese a la afirmación, Cliba es una empresa experimentada en el trazado de recorridos, teniendo en cuenta que mantiene los mismos, y sus choferes continúan en sus puestos.
“Todo cambio tiene siempre un proceso de ajuste”, evaluó el secretario de Medio Ambiente porteño, Eduardo Epszteyn. “Hay que tener en cuenta que han cambiado las empresas, han cambiado los recorridos que realizan los camiones, y muchos choferes acostumbrados en los últimos siete años a un recorrido hoy están teniendo que hacer otro”, entendió. Y dijo que “sabíamos que podía haber algún tipo de problema, pero lamentablemente han sido más de lo que hubiéramos deseado. Los primeros días podemos tener algún tipo de problemita con la recolección. Esperemos que sean menores que los del domingo y ayer”, enfatizó.Greenpeace vio como “insuficiente el promocionado cambio en el modelo de gestión de residuos urbanos que, de forma desordenada, puso en marcha ayer el Gobierno porteño”, porque “no resuelve el problema de la basura de la ciudad, que sigue siendo mayormente enterrada en el conurbano”, evidenció Verónica Odriozola, coordinadora de la Campaña contra la Contaminación de la ONG. Y abogó por la adopción “de un cronograma obligatorio de prevención de la generación de residuos, recuperación y reciclaje”, porque “existe una crisis real en la disposición final de la basura”, sostuvo.
Subnotas