SOCIEDAD › ¿POR QUE CELIA MARTINEZ?
En la lucha
Por W. U.
Celia Martínez tiene 47 años y hace diez que trabaja en Brukman, la fábrica textil que fue tomada el 18 de diciembre, pocas horas antes de la caída del gobierno de la Alianza. Hoy es parte del cuerpo de delegados y se ha constituido en uno de los pilares del proyecto autogestionado. Habla sin sobresaltos pero es terminante a la hora de plantear su postura respecto de los objetivos y de la lucha que llevan adelante. Admite, no obstante, que antes de empezar a trabajar en Brukman, su actitud frente a los asuntos políticos, los conflictos sociales y los rumbos de la economía era pasiva y desinteresada. Hoy reconoce que saber lo que pasa, qué hay detrás de las decisiones políticas y quiénes son los que “nos representan” es esencial para llevar adelante la lucha de Brukman y la de todos. Antes, miraba la realidad a través de la televisión y pasaba meses dentro de su casa, atendiendo quehaceres individuales. Hoy, lucha junto a sus compañeras de la fábrica, pero también acompaña un piquete y se enfrenta a la policía, en apoyo a “los compañeros” de Metrovías.
El desinterés de sus hijos mayores y el reclamo de la menor por ser más escuchada la hacen preguntarse “si dejar tantas cosas” en pos de esta lucha sirve para algo. Una duda que se diluye cuando reconoce que éste es el momento justo para dar la pelea... y que es protagonista de esta historia.