SOCIEDAD
De Africa a la Argentina
Hace más de cinco años que Pedro Opeka no venía a la Argentina. Y la crisis con la que se encontró lo conmocionó. “Me sorprende muchísimo esta crisis que casi destruye el alma argentina. Yo estoy acostumbrado a las calles con vida y alegría, y aquí veo una ciudad fantasma, veo la falta de respeto del uno al otro. No sé cómo se ha llegado a esto, tal vez todos nos hemos quedado un poco dormidos”, confiesa.
“Las villas se fueron creando solas, fueron creciendo sin contención, sin Estado ni una organización seria y sistemática. La gente fue abandonada. Y ahora se toma su revancha”, explica Opeka.
“–Pero yo quiero rescatar y homenajear a mucha gente que sí se esfuerza día a día trabajando con los pobres. Sé que eso también existe aquí y es muy importante rescatarlo” destaca. Y confiesa su experiencia: “Cuando se lucha con los pobres, se lucha casi solo. Pero se lucha con la gente. Eso es lo más importante”.