Entre los casos de sacerdotes involucrados en delitos sexuales, el más resonante es el que tuvo como protagonista a Julio César Grassi, acusado por el presunto abuso de dos chicos que vivían en la fundación Felices Los Niños, delitos que están a punto de ser ventilados en juicio oral. Luego de un informe del programa “Telenoche Investiga”, el año pasado, se conocieron los casos de presunto abuso sexual contra un chico identificado en la causa como “Gabriel”, de 22 años, y contra “Ezequiel”, de 19. La fiscal del caso, María Rita Bustamante, acusó a Grassi de haber manoseado los genitales y practicado sexo oral a Gabriel, en 1996, y de abusar de Ezequiel en su oficina, en 1998. En octubre del año pasado el cura estuvo preso durante casi un mes y luego fue liberado aunque la jueza de Morón, Mónica López Osornio de Kon, le prohibió entrar solo a la Fundación.
El 5 de agosto López Osornio dispuso que Grassi enfrente el juicio oral y rechazó un pedido de nulidad presentado por la defensa para que se consideren improcedentes las pericias psicológicas sobre los jóvenes. La defensa apeló la decisión ante la Cámara Penal de Morón y, si se rechaza la solicitud, el juicio oral podría comenzar el próximo año.