FERNANDO MAROTO *.
“Desviación legal”

La creación de fuerzas policiales en los municipios es una desviación legal y genera cierta desconfianza porque no sólo es un grupo sospechado de su accionar y facultades sino que también puede conducir a una suerte de Gestapo. Estas fuerzas pueden quedar en manos violentas y sin control, o en personas vinculadas con la maldita policía.
Hay un evidente avance del autoritarismo porque no es casual el pedido de fueros que hicieron los intendentes bonaerenses. Estos funcionarios piensan que en algún momento van a poder tener el control policial. El gobernador Felipe Solá lo llama descentralización, pero quiere dar atribuciones de control a los intendentes cuando es ilegal. Esta se asemeja a una salida elegante ante el fracaso del gobierno provincial para resolver la corrupción policial.
Esta es una desviación legal porque no está previsto en la ley de Seguridad Pública ni en la ley orgánica de la Policía. Lo que hay que hacer es una policía nueva tal como lo ordena la Constitución, pero seguramente eso da mucho trabajo.
• Camarista de San Isidro.


ALBERTO BINDER *.
“No soluciona nada”

Esta medida es parcial y demagógica porque no revierte el problema de la seguridad. No se puede complejizar más este tema con una medida que le hace creer al vecino que se resuelve el problema cuando no soluciona nada.
Es indispensable que los municipios se involucren en la política de seguridad y uno de estos problemas es el funcionamiento de la policía y la vigilancia. Los intendentes no tienen responsabilidad directa en seguridad, lo que es negativo porque facilita un discurso demagógico de mano dura. El problema de los municipios no se va a resolver con estos vigiladores porque no salen del esquema actual, que favorece la irresponsabilidad y la corrupción.
Para salir de este panorama hay que generar políticas de seguridad en las intendencias, implementar la responsabilidad de los municipios y que las provincias se queden con una función de control. Hay que rediseñar las fuerzas policiales en el marco de un proceso de descentralización. Para eso deberían transferir recursos, con policías más vinculados con la vida local bajo la responsabilidad de los políticos locales.
• Vicepresidente del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales.


F. NIEVA WOODGATE *.
“Falta un marco legal”

Con esta propuesta se intenta compartir el accionar de la policía para que el control ciudadano sea más efectivo. Esto funciona muy bien en el extranjero, pero ignoro si aquí va a funcionar. El problema es quién va a ejercer el control y cuán honesto va a ser ese ejercicio.
La idea original de este sistema proviene de Estados Unidos, donde existe la policía municipal, la estatal y la federal. En la Argentina nunca existió la fuerza municipal, pero podría hacerse una experiencia. De todas formas, hay que ver cómo se instrumenta para hacerlo bien. Para eso hay que empezar por una ley que avale esta medida.
Cuando se creó la Policía Federal se hizo algo similar. Además, la policía provincial tiene funciones de seguridad que le da el Código Procesal Penal que no la tiene ninguna otra fuerza que no sea creada por ley, por lo que habría que ver el marco regulatorio en el caso de los vigiladores municipales. Debe quedar bien claro cuáles son las funciones de estos policías retirados para hacerlo bien porque, si no, es mejor no hacerlo.
* Fiscal general de Morón.