SOCIEDAD
• SUBNOTA › SUMARIO A UNA MAESTRA QUE HABLO DE PRESERVATIVOS
Polémica en el séptimo grado
El caso se había zanjado internamente, pero la proximidad del tratamiento de la ley de educación sexual lo desenterró. Es una denuncia impulsada en septiembre por un grupo de padres de séptimo grado de la Escuela Normal 5 de la ciudad de Buenos Aires contra una maestra. Por decisión propia, la maestra dio una clase de educación sexual en la que incluyó presuntamente un análisis sobre “texturas de los preservativos” y les pidió a los alumnos “un pacto de silencio”. La maestra ya no está al frente del grado, y aunque la Junta de Disciplina consideró que no había razones para iniciar un sumario, la Dirección de Educación Superior lo inició de todos modos el jueves pasado. Los legisladores porteños que impulsan la sanción de la ley de educación sexual consideran que una norma de ese tipo es la única herramienta capaz de ordenar situaciones como éstas: “El docente solo y aisladamente no puede decir qué dar ni cómo darlo”, evalúan.
El nombre de la docente no trascendió por razones legales. Hasta hace unos quince días, daba Ciencias Naturales en séptimo A y B de la escuela en el turno mañana como suplente. Y a la tarde estaba en un cuarto grado como “interina”. De acuerdo con la información recogida por este diario, el episodio en cuestión ocurrió cuando decidió “dar por su cuenta contenidos de educación sexual, para lo cual armó un buzón de preguntas en uno de los séptimos”.
Cuando dio la primera clase, los padres de los chicos se quejaron ante la dirección de la escuela. Por esa razón, la directora “le ordenó no continuar con el tema y le solicitó que no repitiera la experiencia en el otro séptimo”, indica un informe. Pero aun así continuó: repitió la clase en el otro grado pero antes les pidió a los alumnos que “lo haría si no decían nada”, indicó una fuente del área. Sobre el contenido de la clase, la información es confusa. Fuentes cercanas a la investigación que acaba de iniciarse indican que habló sobre “texturas de profilácticos” y “masturbación”, aunque la maestra lo negó durante su descargo.
Tras la clase, los padres presentaron un reclamo en la dirección de la escuela y ante la Secretaría de Educación de la ciudad. La maestra reconoció haber dado las clases, pero aseguró no “haber explicado cómo masturbarse ni haberles hablado de experiencias personales”, indica un informe de la legisladora Ana Suppa sobre el rumbo del caso y de la investigación. Como permanece con clases a la tarde, algunos padres de ese grado están inquietos y piden que se la separe del cargo. Para Suppa, “más allá de la veracidad o falsedad de las denuncias, lo que esta situación pone de manifiesto es que la educación sexual debe dictarse en el marco de la capacitación previa de los docentes y de acuerdo al control y supervisión de los contenidos y actividades que se programen”.
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