El juez Carlos Liporace, que investiga el contrabando de cocaína a España en un vuelo de Southern Winds, concurrió ayer a su despacho para analizar las “30 medidas urgentes” que la Cámara le ordenó que tomara. Los camaristas le dijeron al juez que indagara a los directivos de SW, como había solicitado la fiscal. Una fuente sostuvo que “la orden es clara: hay que ampliar el número de imputados, hacia arriba y los costados”. En el fallo, que dejó a Liporace al borde del juicio político, se sostuvo que “no resulta lógico suponer” que el delito “haya sido llevado a cabo, únicamente, por las personas que hasta el momento se encuentran procesadas”.