En Colombia se desató una verdadera “búsqueda del tesoro” luego que un obrero que taladraba una ruta en la montaña descubriera una veta de esmeraldas. Al propagarse la noticia, cientos de personas acudieron a esa zona remota, conocida localmente como la Nariz del Diablo, en el noroeste del departamento de Boyacá, centro oriente del país. Según cuenta el alcalde Omar Casallas, citado por el diario colombiano El Tiempo, tres obreros que abrían un hueco el viernes para instalar un muro tipo Caisson –una especie de pilote que soporta una estructura en un área inclinada– hallaron las esmeraldas. “Mientras uno de ellos perforaba con un martillo hidráulico, vio una piedra verde que brillaba. De inmediato, el sonido de las máquinas se enmudeció”, señaló el periódico.