“Las ART asesoran a las compañías, pero sólo se ocupan de empresas y sectores que concentran el mayor riesgo, porque no se puede diseñar un plan preventivo para cada empresa. Sería muy costoso y los empleadores no podrían afrontarlo. Por eso se trabaja con muestreos. De todas maneras, el poder para inspeccionar y sancionar lo tiene el Estado. No es responsabilidad de las ART supervisar y sancionar a las empresas. El sistema funciona mejor de lo previsto. El aumento de los accidentes no necesariamente se explica por una disminución en la prevención. Si la composición del producto cambia los accidentes, pueden aumentar porque las actividades más riesgosas ganan terreno. Las autoridades deben concentran sus esfuerzos para captar a los trabajadores que están fuera del sistema.”