En Brasil, el Bndes, que tiene más de medio siglo de funcionamiento, es un buen ejemplo de Banco de Desarrollo. Creo que en la Argentina para llevar adelante el Banco de Desarrollo hay que tener criterios bancarios sólidos, mucha autonomía respecto del poder político, debe conservar equipos muy profesionalizados y auditorías externas fuertes. Por otro lado, creo que no se debe limitar el financiamiento sólo a las pymes sino que hay que hacer un planeamiento amplio del proyecto. Financiar a grandes empresas es también muy importante. Hay que tener en cuenta otra cuestión: en Brasil, el Bndes depende del Ministerio de Planificación o Desarrollo, no de un área financiera del gobierno. Esto quiere decir que las prioridades están articuladas con una política global en materia de desarrollo económico. Porque un Banco de Desarrollo tiene que ser un instrumento de una política de desarrollo económico. Esto es central. De quién dependa el banco tiene que ver con su éxito. En cuanto a cómo debería financiarse, creo que con lo que la Anses pueda darle va a tener una envergadura limitada. El banco también puede autofinanciarse: el Bndes se autofinancia. Va a llevar tiempo.