Teatro del País es el ciclo que desde 2008 organiza el Teatro Nacional Cervantes para promover el intercambio de experiencias y la circulación de obras. En la edición de esta temporada, diecinueve elencos provinciales mostrarán sus trabajos entre hoy y el viernes 21 de diciembre, con entrada gratuita, en las tres salas del teatro de Libertad y Córdoba. A modo de apoyo al ciclo, se realizará una función de La Nona, de Roberto “Tito” Cossa, en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, levantado en el predio de la ex ESMA (Av. del Libertador 8151). Este encuentro cierra la temporada del Cervantes Federal, programa que incluye coproducciones con organismos de cultura de las provincias, piezas seleccionadas por el Instituto Nacional del Teatro, otras por el TNC, y elencos invitados, así como la organización de giras nacionales y actividades que favorezcan la inserción del teatro en las escuelas. En la primera jornada se verán Sábado de vino y gloria, de Alberto Drago, dirigida por el sureño Norberto Barruti, fundador del Taller de Teatro de la Universidad Nacional de La Plata y la Biblioteca Teatral Alberto Mediza. Será a las 21, en la Sala María Guerrero. Otra propuesta es En los brazos de Alfredo Alcón, de Elena Bossi y puesta de María del Carmen Echenique. Esta pieza se interna en la tensa relación que mantienen una madre y su hija durante un viaje insólito (a las 21.30, en la Sala Orestes Caviglia). El viernes 30 es el turno de Popesku debe morir (cuatro personajes decididos a frenar el atropello de los poderosos), obra escrita y dirigida por el tucumano Guillermo Montilla Santillán (a las 19, en la Sala Luisa Vehil).

La historia del hijo que no cumple los mandatos de su madre judía es el nudo de Volvió una noche, una de las piezas de Eduardo Rovner más estrenadas a nivel internacional. Se ofrecerá el sábado 1º de diciembre, dirigida por Carlo Argento, a las 21, en la Sala María Guerrero. Ese día podrá verse La cosa y la cruz, dramaturgia sobre poemas de los creadores rusos Marina Ivanóvna Tsvetáyeva y Boris Leonídovich Pasternak, dirigida por Nadia Grandón (Grupo La Espina, a las 21.30, en la Sala Orestes Caviglia). Kruvikas (teatro de muñecos), de Marcelo Horacio Reynoso, en versión de Kossa Nostra, irá el domingo 2, a las 18.30, a la Sala Luisa Vehil. La realización y manipulación de los muñecos corresponden a Marcelo Horacio Reynoso y Federico Basko Ugalde.

La imagen de un ser “que anticipa lo inevitable” domina en Presagio, una de las dos coreografías de Carlos Trunsky que presentará el Ballet Contemporáneo del Chaco. La otra pieza es La consagración de la primavera, con música del compositor ruso Igor Stranvinski (obra coreografiada en su origen por Vaslav Nijinsky). La dirección general y artística pertenece a Mariela Alarcón y Lucas Garcilazo (miércoles 5 y jueves 6, a las 21, en la Sala María Guerrero). La pieza teatral El anzuelo, de la dramaturga española Gemma Rodríguez Villanueva, con dirección del cordobés Marcelo Massa, es la propuesta del viernes 7, a las 19, en la Sala Luisa Vehil. Morir en familia, de Jorge García Alonso (uno de los gestores de Teatro Abierto 1981), en versión y dirección de Villanueva Cosse, sube a escena el domingo 9, a las 20.30, en la Sala María Guerrero; y, ese mismo día, a las 21, Trika Fopte (la invención de un lenguaje en un medio donde todo exige gran esfuerzo), escrita y dirigida por Carlos Martín Ayala, hará su función en la Sala Orestes Caviglia.

La Anyula, el voraz personaje de La Nona, de Roberto “Tito” Cossa, ocupará la Sala María Guerrero el jueves 13, a las 21, dirigida por Norberto Barruti. Compartirá esta jornada con Por accidente... los cerdos tendrán su parte, pieza inspirada en la novela Misery, de Stephen King, escrita y dirigida por Rodrigo Cuesta (a las 21.30, en la Sala Orestes Caviglia). El viernes 14, a las 19, se presentará Javiera (Historias que se despliegan), con texto y dirección de Cristian Palacios (Sala Luisa Vehil). Dirige Fabián Castellani. El sábado 15 se multiplican las propuestas: Derechos torcidos, de Hugo Midón y Carlos Gianni, se verá en versión cordobesa, producida por el Teatro Real. La dirección musical es de Gianni y la general de Rubén Segal (a las 17.30, en la Sala María Guerrero). Otro espectáculo es Diego y Ulises, inspirado en la cinematografía del estadounidense Gus Van Sant (El indomable Will Hunting, Last Days). Los autores son Diego Stocco, Ulises Fernández y Marcelo Díaz, y la dirección, de Stocco (a las 21.30, en la Sala Orestes Caviglia). En esa misma fecha, a la 21, se ofrecerá una función de La Nona, pero no en el TNC sino en el Haroldo Conti.

Y estoy vivo y contando... Juan Moreira es la obra de Diego Lovizio sobre el texto original de Eduardo Gutiérrez. Dirige Alejandra Rodríguez. Este espectáculo, concebido para toda edad, se presentará en la Sala Luisa Vehil, a las 18.30, en tanto Surcos de soledad, con dramaturgia de Mario Danna y dirección del autor y de Adriana Nazareno, irá a las 20.30, a la Sala María Guerrero. Cerrando el ciclo, el público podrá disfrutar de una pieza emblemática, Los hermanos queridos, de Carlos Gorostiza (metáfora del desencuentro), dirigida por Alejandro Ullúa, el jueves 20, a las 21, en la Sala María Guerrero; y al día siguiente, en esa misma sala, a las 21, Pintando a Berni... (Collage Opulento Polimatérico), obra para todo público, creada y dirigida por Florencia Cresto. Inspirada en la vida y la producción del artista plástico rosarino Antonio Berni (1905-1981), incluye proyecciones de los originales del creador de La saga de Juanito Laguna e incorpora objetos, muñecos y títeres confeccionados con material reciclado.